La Generalitat Valenciana decidirá en los próximos días si se amplían las circunstancias en las que será obligatorio el uso de la mascarilla en la Comunidad. Así lo confirmó ayer el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, quien recordó que el uso de la mascarilla ya es obligatorio en determinados espacios y momentos, «cuando no se pueden mantener las distancias de seguridad», por lo que de lo que se está hablando «no es de mascarilla obligatoria si o no, sino si se amplía la obligatoriedad en otros ámbitos». Este endurecimiento de la norma estaría relacionado con una mayor flexibilidad en los aforos para determinadas actividades, una cuestión que también se va a regular en los próximos días. «En algún ámbito nos están demandando cierta flexibilidad y si se admite el uso de la mascarilla se podría dar esta flexibilización».
Hasta el momento Puig se ha mostrado contrario al uso obligatorio de esta prenda que han impuesto otras comunidades autónomas como Cataluña bajo el argumento de que debe primar la responsabilidad personal y de que no se puede poner a un policía detrás de cada persona para controlar si cumple o no con la norma. De hecho, Puig advirtió ayer que endurecer las medidas en cuanto al uso obligatorio de la mascarilla «tiene consecuencias que hay que tener en cuenta. Hay que intentar equilibrar lo que tienen que ver con la salud, que es prioritario, con las repercusiones económicas», señaló Puig, quien de nuevo apeló a la responsabilidad personal a la hora de contener la propagación del virus.
Además de ampliar el uso obligatorio de la mascarilla, las nuevas medidas en las que trabaja el Consell también incluirán una variación de los aforos permitidos en determinadas actividades.
El presidente instó a ser «muy conscientes de que la pandemia está aquí» y de que «tenemos que convivir con el virus», pues todavía no hay «un medicamento eficaz ni una vacuna», por lo que es necesaria «la máxima prudencia y responsabilidad».
Volvió a insistir en que «la responsabilidad individual es fundamental» a la hora de detener los contagios de coronavirus, y ha dijo confiar en los valencianos y las valencianas, cuya inmensa mayoría está seguro de que siguen todas las recomendaciones. Como ejemplo cifró en un 92% de ciudadanos en la Comunidad que han seguido el confinamiento durante el estado de alarma.
«Si hay más responsabilidad personal es evidente que se necesita menos normativización», señaló, si bien, añadió que están «en proceso de estudio» las nuevas medidas que se van a adoptar en la Comunidad y que hay que tomar decisiones «en función también de como se vaya actuando».
Sobre los brotes de coronavirus detectados en la Comunidad Valenciana, el presidente afirma que en estos momentos todos están controlados, aunque ha indicado que «no se puede hablar de control absoluto», pues «la sociedad sin riesgo no existe».
Puig añadió que lo importante ahora es que en todos los brotes que vayan surgiendo se pueda hacer el trazado de la red de contactos, actuar directamente y encapsularlos, y ha destacado que en estos momentos las cifras de hospitalizaciones son «muy bajas» en la Comunidad, aunque ha rechazado hacer «el más mínimo triunfalismo».
Encuentro en Madrid con las víctimas de la pandemia antes del homenaje de Estado
El president de la Generalitat, Ximo Puig, mantuvo ayer por la tarde un encuentro con las personas asistentes de la Comunidad Valenciana al homenaje de Estado en recuerdo a las víctimas de la pandemia de coronavirus y de reconocimiento a la sociedad, que se celebra hoy en Madrid. La Presidencia del Gobierno y la Casa Real ofrecieron a la Generalitat la posibilidad de que, junto al presidente, acudieran al homenaje cuatro personas en representación de la Comunidad, lo que ha permitido que diferentes profesionales de algunos de los sectores más afectados por la pandemia hayan podido asistir al acto.
