Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Los 5 kilos de colillas que se retiran al día son un tercio de los residuos de las playas

El presupuesto de limpieza de los arenales se eleva a 800.000 euros - Los restos de cigarros tardan entre 5 y 10 años en degradarse

Las colillas en la playa, problema de limpieza y medioambiente. rafa arjones

Los trabajadores del servicio de limpieza de Alicante recogen una media de cinco kilos diarios de colillas -unas 2.500 unidades- en las playas. Desde UTE Alicante, empresa de limpieza de la ciudad, quieren concienciar a los fumadores de que abandonar una colilla en la arena es todo menos un acto inocuo. «Las colillas suponen la tercera parte de los residuos que se acumulan en las playas (el 30,6% según un estudio de la Universidad Autónoma de Barcelona). Están hechas de acetato de celulosa, un material termoplástico que demora entre 5 y 10 años en degradarse y contienen sustancias tóxicas como cadmio, arsénico, níquel, alquitrán o tolueno cuyos efectos pueden durar todavía más», explican.

UTE Alicante cifra el coste de la recogida de residuos (colillas, latas y envases de plástico principalmente) de las playas entre 750.000 euros y 800.000 euros, lo que supone el 50% anual del presupuesto que se invierte en limpiar los arenales alicantinos. «Muchas veces la solución no está en limpiar más, sino en ensuciar menos», señalan desde la contrata de limpieza. En verano, sobre todo, una ciudad limpia incluye las playas y el mar», insisten.

La molestia visual de encontrar colillas en la arena en un día de playa no es el más peligroso de sus inconvenientes. «Son tan ligeras que es fácil que acaben en el mar, donde son el residuo más abundante y donde, en contacto con el agua, sus componentes nocivos se expanden y una sola colilla puede contaminar entre 8 y 10 litros de agua de mar (hasta 50 litros en el caso del agua dulce). Esas sustancias pasan a la cadena alimenticia a través de los peces y es una causa de mortalidad directa de aves y cetáceos».

El problema del que alerta la empresa de limpieza es global. En España se calcula que en torno a 5.000 millones de colillas acaban en las playas, el 15% de los cigarrillos consumidos. En todo el mundo se multiplican hasta los 4,5 billones de colillas, que terminan ensuciando el medio ambiente. «De hecho algunos científicos sitúan a las colillas como el primer residuo más común en el medio marino, por delante incluso de los plásticos. Todos ganamos si dejamos los lugares que visitamos igual de limpios que como los encontramos, porque el mejor residuo es el que no se genera».

Las multas por arrojar latas, chicles o colillas a la arena ascienden a 210 euros. El problema persiste pese a que el Ayuntamiento de Alicante ha realizado algunos veranos campañas contra el abandono de colillas en las playas, con la vigilancia de la Policía Local para sancionar a los fumadores que las tiran.

Compartir el artículo

stats