La decisión de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas de eliminar la prueba de PCR para los ingresos en los geriátricos ha desatado una oleada de críticas por parte de médicos, trabajadores y familiares, que consideran que con esta medida, que en su opinión está basada en un intento de reducir costes, se va a incrementar el riesgo de contagios por coronavirus. La patronal de las residencias destaca que la Comunidad Valenciana es la única del conjunto de España que ha optado por suprimir el test, si bien ya hay centros que anuncian su intención de mantenerlo por su cuenta al considerarlo imprescindible. Las consellerias de Sanidad e Igualdad, mientras tanto, han optado por el silencio pese al revuelo causado con esta decisión.
Tal y como se avanzó ayer, el nuevo protocolo de la Conselleria de Igualdad para la prevención del coronavirus en las residencias elimina la obligatoriedad de realizar una prueba de PCR a los ancianos que ingresan en las mismas. El departamento autonómico mantiene el aislamiento de 14 días, pero suprime este requisito que sí se exigía hasta la fecha.
La medida ha tenido una amplia contestación por parte de los profesionales relacionados con los geriátricos. El presidente de la patronal de las residencias, José María Toro, que ya se mostró muy crítico nada más conocer el texto publicado ayer en el DOGV, insistía ayer en su «perplejidad», indicando que «es una decisión muy arriesgada, que puede incrementar el riesgo de contagios y favorecer la entrada en los centros de personas asintomáticas».
El responsable de Aerte, asimismo, destaca que, al menos hasta el momento, la valenciana es «la única comunidad autónoma que ha adoptado esta medida. Los responsables de las asociaciones de residencias de los otros territorios también se han mostrado muy sorprendidos».
Responsables médicos de distintos geriátricos, como es el caso de Vistasol5 en Alicante, también han expresado su rechazo a la medida, sobre la base de que aunque las pruebas de PCR sólo ofrecen una foto fija de ese momento, siempre suponen un indicador para los centros a la hora de adoptar medidas y tratar a los nuevos residentes. La filosofía es que «más vale pasarse que quedarse cortos», en lo que respecta a las medidas preventivas. Algunas residencias, como la citada, ya han anunciado su intención de mantener las pruebas por su cuenta, pese a que por parte de la patronal se considera que «debe ser la administración la que asuma los costes, porque al fin y al cabo estamos hablando de una cuestión de salud pública», subraya José María Toro.
Por parte de los trabajadores se comparte esta visión. Carmen Ortega, de la residencia Emilio Sala de Alcoy y delegada de UGT, señala que «es cierto que la prueba de PCR es un poco aleatoria, porque corresponde a un momento concreto, de ahí que lo imprescindible sean los aislamientos de 15 días. Pero de cualquier forma, se trata de una herramienta muy útil para conocer el estado de la persona en el momento del ingreso y para tomar las medidas oportunas».
Los familiares de los residentes también se muestran muy críticos, tal y como señala José Luis García, portavoz de la plataforma de familiares de la residencia de Oliver en Alcoy, la más afectada por la primera oleada de contagios con 73 fallecidos. «Se trata -señala- de una medida con la que lo único que se busca es ahorrar dinero, lo cual me parece indignante teniendo en cuenta todo lo que ha pasado».
Lo que sí se mantiene en el nuevo protocolo es el aislamiento de 14 días, algo que algunos ancianos encajan mejor que otros. La psiquiatra Lorena García, del Hospital de Sant Joan, señala que «el aislamiento siempre afecta y puede agudizar patologías relacionadas con la confusión o las paranoias, entre otras. En todo caso, si se explica bien y entienden que se trata por su salud y la del resto de residentes, lo pueden llevar mejor».
Mientras las críticas arreciaban, las consellerias implicadas optaron ayer por guardar silencio, pese a los intentos de este diario de obtener la versión de Igualdad respecto al motivo de la supresión de la prueba, y conocer si Sanidad comparte la medida.
La Conselleria de Sanidad actualizó ayer los datos de las residencias, comunicando que en la provincia hay nueve que tienen casos de coronavirus, lo que supone una más que la jornada anterior. En el conjunto de la Comunidad se registraron 14 nuevos positivos de residentes y dos de trabajadores, lo que eleva el total de casos registrados desde mitad de julio por encima de los 90.
