Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Arrecian las quejas de los usuarios por el colapso en los centros de salud

Los médicos de Atención Primaria admiten que van desbordados y denuncian falta de recursos y de inversión

Una imagen del centro de salud de San Blas, en Alicante, con usuarios esperando atención bajo una carpa para evitar una insolación. PILAR CORTÉS

«¿Ve?, no da tiempo material a hacer más de lo que hacemos. Si un paciente llama y no se le coge el teléfono es porque se está atendiendo a otra persona. Es lo que hay. Falta una buena gestión de la Atención Primaria, pero sobre todo faltan recursos y no se invierte cuando somos la primera barrera para evitar la sobrecarga de los hospitales por el coronavirus». Quien habla es un médico de un centro de salud de Alicante que admite que van desbordados y no solo en la capital de la provincia porque en Elche ocurre, principalmente a primeras horas de la mañana una situación muy similar, según confirman los sanitarios. Y no sólo eso, sino que prevé que la situación «irá a peor en otoño» porque la vuelta a la normalidad que trae septiembre y las patologías propias de meses más fríos multiplica la necesidad de atención sanitaria.

Los usuarios se quejan de que llaman y llaman y de que les cuesta mucho contactar y que, cuando no lo consiguen y deciden acercarse a su centro de salud, se encuentran con una cola en la calle para poder entrar, muchas veces, a pleno sol. Este periódico ha recibido numerosas quejas de usuarios hartos de esta situación. Una de estas personas aseguraba que se tuvo que «poner seria» para que le hicieran la PCR tras haber estado en contacto con una persona que había dado positivo y convivir con una persona de riesgo. Pero los principales afectados por esta situación son las personas mayores, con un gran desconocimiento del funcionamiento de los sistemas imformáticos como forma de contactar con su centro de salud y que recurren a un teléfono que prácticamente comunica durante toda la jornada. Ante esta situación acuden a la puerta porque si algo tienen es tiempo y paciencia hasta que consiguen que les toque el turno y que el administrativo que les atiende, que es el mismo que coge estas llamadas, les dé cita.

La presidenta de la Sociedad Valenciana de Medicina Familiar y Comunitaria (Sovamfic), María Ángeles Medina, y el Sindicato Médico ya han denunciado el colapso que se sufre en los centros de salud y que los médicos se ven obligados a atender a 60 pacientes al día combinándolo con su papel de rastreadores de covid-19 y con el resto de tareas burocráticas. La cifra máxima debería ser de 30 pacientes, indica.

«Los refuerzos que han llegado desde la Conselleria son médicos sin la especialidad y sin experiencia», denuncia Medina. «Y donde han llegado porque nosotros calculamos que en la provincia harían falta un 20 por ciento más de profesionales sanitarios y a muchos sitios no ha llegado nadie», lamentó.

«A la situación hay que añadir que un tercio de la plantilla está de vacaciones en verano y que con el plan para cubrir vacaciones, tal y como está organizado, no alcanza en estos momentos», añade el médico alicantino. Además, la representante de los médicos de familia advierte que «la atención a los pacientes se resiente. La atención telefónica no puede alargarse seis meses», critica.

Compartir el artículo

stats