Los primeros 30 efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) que colaboran con Salud Pública en las tareas de rastreo de infecciones por coronavirus en la Comunidad Valenciana comienzan a operar este viernes desde la Base Militar de Bétera.

Sus principales funciones son la identificación y control de contactos estrechos de infecciones confirmadas por coronavirus. Desarrollan esta tarea a través de la realización de encuestas y trabajan siempre de forma coordinada con Salud Pública.

El equipo se ha conformado dando prioridad al personal con perfiles sanitarios, bien Medicina, Enfermería, Farmacia, Psicología, atención de emergencias o similares.

Además, todos sus integrantes han completado un programa específico para optimizar su formación y el desempeño de las tareas requeridas. El curso ha abordado aspectos técnico-científicos sobre el virus SARS-CoV-2; las herramientas recomendadas por la Organización Mundial de la Salud para establecer el rastreo de contactos y cuarentenas; la técnica del proceso de rastreo y casos prácticos; los aspectos éticos en las funciones de rastreo, así como habilidades para una comunicación efectiva.

La Unidad de Vigilancia Epidemiológica también recibe de forma permanente actualizaciones en base a las nuevas evidencias científicas en relación al virus y al manejo de casos y contactos.

Se trata de la primera Unidad de Vigilancia Epidemiológica operativa en la Comunidad Valenciana. A ella irán sumándose el resto, en grupos de 30, hasta llegar, previsiblemente a finales de septiembre, a los 150 solicitados para la Comunidad Valenciana. Estos efectivos se mantendrán operativos el tiempo necesario.