Agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local de Pego desalojaron en la mañana de ayer una fiesta «rave» donde se habían citado cerca de un centenar de personas venidas de media España, según fuentes de la policía del municipio. Ninguno de los participantes en esta celebración ilegal llevaba puesta una mascarilla.

Al parecer, el titular de la nave, que no sabía nada de tal evento, es el padre del supuesto organizador de la fiesta ilegal. El promotor avisó a varios amigos para reunirse en el local, situado en el Camí de la Marjal Major de Pego, alejado del núcleo urbano de la población. La convocatoria masiva se habría organizado a través de las redes sociales y logró congregar a decenas de personas (diversas fuentes hablan de más de cien), venidas desde distintos puntos de España.

En el momento en el que irrumpieron en el lugar los agentes -cuatro patrullas de la Guardia Civil y varias de la Policía Local de Pego- se encontraron a unas cuarenta personas en el centro de la fiesta. Se sospecha, no obstante, que buena parte de los participantes ya habrían abandonado la «rave» y que otros podrían estar ocultos en los campos de la zona. Según pudo saber este periódico, la disc-jockey de la fiesta era de Albacete y está confirmado que había personas de Picanya (Valencia), Cabo de Gata (Almería), Madrid y Zamora, entre otros puntos del país.

Durante la mañana de ayer los agentes identificaron a los participantes que se encontraron dentro de la nave. Una gran mayoría permanecieron varias horas en la zona porque muchos de ellos habían ingerido alcohol y no estaban, por lo tanto, en condiciones de conducir. Por ello, el dispositivo policial se prolongó durante toda la mañana.