Las dos grandes contratas de la ciudad -la limpieza viaria y recogida de residuos y el transporte urbano- pondrán a prueba este nuevo curso el «problema en materia de gestión de contratación» del Ayuntamiento de Alicante, del que ha vuelto a advertir el interventor municipal en un nuevo informe en el que critica los endémicos retrasos en la adjudicación de contratos.

El documento firmado por el alto funcionario se refiere al servicio de mantenimiento de zonas verdes, que se presta fuera de contrato desde hace dos años. En concreto, desde julio de 2018. Hasta una semana después de que finalizase ese contrato, el gobierno local, ya liderado por Luis Barcala, no remitió la documentación necesaria para la tramitación del expediente de contratación del servicio.

A ese retraso inicial, se han ido sumando otros derivados de recursos ante el Tribunal Central de Contratación por parte de licitadores, que mantienen el servicio aún sin adjudicatario. Cada mes, el Ayuntamiento paga en torno a 375.000 euros a la empresa que presta el servicio fuera de contrato. En este escenario, el interventor insiste en que la concejalía «no impulsó el expediente con antelación suficiente para su adjudicación en plazo», además de subrayar que «se ha producido un incumplimiento de los procedimientos establecidos en la Ley de Contratos, debido al retraso en la tramitación del expediente». El interventor, además, recuerda que no se trata de un hecho «aislado», ya que no es el único servicio que el Ayuntamiento presta fuera de contrato.

Con la vista puesta en un futuro inmediato, el bipartito debe enfrentarse a la renovación de las dos grandes contratadas del Ayuntamiento: la limpieza viaria y recogida de residuos (que todo apunta a que se dividirá en dos contratos) y el del transporte urbano. El primero finaliza en un año y cabe una prórroga que el bipartito, en el caso de necesitarla, anunció que prevé negociarla para que no sea de dos años. El segundo termina antes, en julio, y ya no caben más prórrogas, así que se tendría que prestar fuera de contrato, como reconoció ayer el concejal de Contratación, Manuel Villar, quien admitió además que la pandemia ha generado retrasos en ambas tramitaciones.