Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Alicante pagará el reajuste de luz en la Oficina de Turismo para no retrasar más su apertura

El Ayuntamiento asumirá la factura del proyecto que paliará la falta de potencia eléctrica en la instalación financiada por el Consell - La edil Mari Carmen Sánchez quiere «abrir lo antes posible aunque sea con lo mínimo» y da como nueva fecha finales de este mes

La oficina, en agosto, cuando Turisme de la Generalitat entregó las llaves al Ayuntamiento.

El Ayuntamiento de Alicante asumirá la factura de las obras para incrementar la potencia eléctrica de la Oficina de Turismo, último escollo surgido en esta instalación, para no retrasar más su apertura. Una oferta turística en la plaza del Puerto «maldita» que ha sufrido numerosas demoras, ya que tendría que haber entrado en funcionamiento en el primer trimestre de 2019, más allá de la polémica que la rodea, por su impacto visual, desde la concepción del proyecto, financiado en su totalidad por el Consell, incluido el mobiliario, con unos 720.000 euros.

Por tanto, pese a que la instalación pertenece a la Generalitat, que la cedió el 10 de agosto al Ayuntamiento, éste ha optado por costear las obras para solucionar el problema con la potencia energética «porque si lo paga el Consell se retrasará aún más», admitieron ayer desde la Concejalía de Turismo en referencia a los trámites que habría que realizar, «aparte de que la adecuación eléctrica la tenemos que hacer». El Ayuntamiento se encargará del mantenimiento y de aportar el personal, tres trabajadores de la oficina turística situada en la planta baja del edificio Consistorial, que cierra al público.

La Concejalía de Infraestructuras está diseñando el proyecto para solucionar el problema con el sistema eléctrico mediante una canalización de un centenar de metros de longitud para poder dotar a la oficina de la potencia que requiere. La vicealcaldesa de Alicante y concejala de Turismo, Mari Carmen Sánchez (Ciudadanos), explicó ayer que se están haciendo pruebas «para ver qué salta y qué no salta porque, si salta todo, no podemos trabajar», con la idea de «abrir al público lo antes posible, aunque sea con lo mínimo».

La edil dio como nueva fecha finales de este mes si esas pruebas que se están realizando permiten la puesta en funcionamiento, «de manera provisional con lo básico para trabajar» dado que existe un «desfase» que obligará a hacer una zanja para extender el sistema eléctrico de la Oficina de Turismo hasta conectarlo con un punto de la red municipal situado en las proximidades del antiguo hotel Palas, junto a la plaza del Mar.

Volviendo al acto oficial de inauguración, celebrado el 10 de agosto, el secretario autonómico de Turisme, Francesc Colomer (PSPV-PSOE) entregó las llaves del inmueble a la vicealcaldesa, quien declaró la intención de abrir la oficina a la siguiente semana. Cosa que no se produjo, en un enésimo retraso a la espera de la luz y el agua. El edificio está en suelo de la Autoridad Portuaria, lo que es «una movida», dijeron ayer fuentes municipales, al depender también de los permisos del Puerto. En ese acto, el Ayuntamiento descartó definitivamente trasladar la Oficina de Turismo a otra ubicación, como se acordó en verano de 2019 ante las críticas de profesionales y ciudadanos por su impacto visual sobre la fachada marítima en una reunión entre el alcalde, Luis Barcala; la propia vicealcaldesa; y el director general de Turisme, Herick Campos. En noviembre de 2019 Barcala lo supeditó a que su precio fuera «razonable». En la entrega de llaves, ya en la era del covid, la edil de Turismo dijo que está en un punto estratégico y calificó el traslado de coste innecesario.

Compartir el artículo

stats