Cuatro meses después del último encuentro, que se celebró el pasado 12 de mayo, cuando la Comunidad Valenciana todavía se encontraba en Fase 0, el alcalde de Alicante, Luis Barcala (PP), y la consellera de Sanidad, Ana Barceló (PSOE), volvieron ayer a verse las caras. Fue a través de una nueva reunión telemática en la que se abordó la situación epidemiológica de la ciudad de Alicante, que actualmente presenta una incidencia acumulada (casos por cada 100.000 habitantes) de 174, cuatro veces más que hace solo un mes.
Barcala, que fue el promotor de la reunión tras una petición formal cursada justo una semana antes, reprochó a Sanidad la falta de datos necesarios para que los ayuntamientos puedan hacer frente a la pandemia con la adoptación de medidas extraordinarias. De hecho, el alcalde lamentó que Barceló no acudiera con información detallada de Alicante al encuentro celebrado ayer, en el que -según Barcala- hubo hasta datos contradictorios, en alusión a que antes de la cita se informó al bipartito de que el principal origen de los brotes era laboral y ayer se puntualizó que era social. «Lamento que esta reunión no haya servido para aportar la información que venimos reclamando desde hace seis meses. Necesitamos una información más detallada y rigurosa para saber si se debe tomar algún tipo de decisión complementaria», apuntó el regidor alicantino, quien se mostró esperanzado ante un anunciado cambio de actitud de la conselleria. Según Barcala, Sanidad se ha comprometido a mantener a partir de ahora contactos semanales con el Ayuntamiento de Alicante con datos actualizados sobre la mesa. «Es difícil de asimilar que sea ahora cuando reconozcan que se nos tiene que dar la información que pedimos. Esa información es vital porque es la que nos permite trabajar y planificar», prosiguió el regidor popular.
En la reunión de ayer, el Ayuntamiento y la conselleria decidieron no adoptar más medidas restrictivas para controlar la curva en Alicante. No hacen falta más limitaciones, al menos, de momento. De hecho, según Barcala, Sanidad reconoció que la situación «covid» de la ciudad es «buena», aunque no por ello deje de preocupar el incremento de casos constante, que en la última semana ha supuesto 309 nuevos contagios. Desde al conselleria, a preguntas de este diario, no quisieron valorar el resultado de la reunión con Barcala.
Permisos y terrazas
La reunión tampoco sirvió, según el alcalde de Alicante, para avanzar en la situación de la hostelería, que desde hace un mes tiene horarios limitados para bares y cafeterías y la prohibición de apertura para pubs y discotecas. Barcala puso sobre la mesa la posibilidad de que la conselleria levante la mano promoviendo cambios en las licencias para que los pubs puedan abrir -con limitación de horario- como si fueran cafeterías. Esa propuesta parece que no tendrá mucho recorrido por el momento, según admitieron fuentes de Alcaldía, que subrayaron que Sanidad sigue firme en mantener las restricciones al sector del ocio nocturno, que esta semana volvió a movilizarse en la ciudad de Alicante. En esa línea, el departamento autonómico dejó en manos del Ayuntamiento las modificaciones de los permisos, una medida reclamada por el sector que el alcalde rechazó recientemente porque -considera- que supone abrir «una puerta trasera». Lo «razonable» para el alcalde es que sea Sanidad la que determine si estos locales «pueden usar sus terrazas como el resto del sector».
El bipartito ha elevado al pleno del jueves una propuesta para presionar a Sanidad con el alivio de las medidas para la hostelería.
