La Virgen de la Soledad «La Marinera» abandonará el próximo 3 de octubre el convento de las Monjas de la Sangre, en el Casco Antiguo de Alicante, para ser trasladada al monasterio de la Santa Faz, donde se encuentran las hermanas Agustinas que custodian la Reliquia desde hace 15 meses. Esta orden fue elegida por la Iglesia tras dejar el convento las Clarisas, responsables de proteger a la Santa Faz durante cinco siglos.

Ya desde su marcha a la pedanía, las religiosas mostraron su voluntad de llevarse a la Virgen, que estará expuesta en un lugar preferente del templo, a la vista de las hermanas desde el coro, pero no en el altar. «La Marinera» es la imagen más antigua que se venera y abandonará en 15 días el convento de las Monjas de la Sangre, donde es venerada desde 1604. En estos cuatro siglos, como recordó el edil de Fiestas, Manuel Jiménez, ha sido profanada dos veces y también restaurada.

Julio Azuar, presidente de la hermandad del Divino Amor y la Virgen de la Soledad, a la que pertenece «La Marinera», dio a conocer ayer los actos que se celebrarán el sábado 3 de octubre, a partir de las 20 horas. La imagen saldrá del convento de las Agustinas tras ser despedida por la cofradía con una oración. La Orquesta Joven de la Provincia tocará los acordes del himno nacional y varias marchas, y será conducida a un vehículo para su transporte en una urna de metacrilato. La Policía Local escoltará la comitiva hasta el monasterio y la cofradía se trasladará en autobuses por cortesía de Antonio Arias, del grupo Vectalia.

Entrará en la pedanía portada a hombros de la tuna de Derecho, que forma su cuadrilla de costaleros desde hace más de 30 años y una banda de música de Sant Joan interpretará el himno. Las monjas Agustinas la recibirán con cánticos a su entrada al templo.

El presidente de la Junta Mayor de Hermandades, Alfredo Llopis, dijo que la Marinera es «la cuna» de la Semana Santa, ya que «muestra nuestro origen, es la referencia más antigua. Dos de las devociones más importantes en el corazón de los alicantinos, la Santa Faz y la Marinera, estarán de nuevo juntas, como lo han estado tantos siglos». El concejal de Fiestas expresó su agradecimiento a la cofradía del Cristo del Divino Amor «porque las monjitas de la Sangre, como ha venido ocurriendo desde hace siglos, volverán a custodiar la imagen de la Virgen de la Soledad».

Sobre el uso que anunció el bipartito para el Convento de las Monjas de la Sangre, el de Museo de Semana Santa, el edil indicó que se están dando pasos pero los trámites aún no se han iniciado. Dijo que se pedirá ayuda económica a otras instituciones porque «la Semana Santa necesita este espacio al ser uno de los principales atractivos turísticos» de la ciudad.