La situación de aislamiento a causa del covid en la que se encuentran siete módulos de las cárceles alicantinas de Fontcalent y Villena está obligando a suspender juicios por los riesgos de contagio que suponen estos traslados. Los directores de las prisiones han remitido escritos a los juzgados informando de la situación y pidiendo a los magistrados que valoren la posibilidad de suspender estas vistas o de celebrar estas comparecencias por videoconferencia.

Mientras en Villena no hay constancia de ningún positivo y se está a la espera de la evolución de la cuarentena, en Fontcalent al menos una decena de presos y un sanitario están contagiados y ha sido necesario el cierre de tres módulos. El aislamiento en cuatro módulos de Villena comenzó el miércoles de la semana pasada, después del positivo en covid que dio una profesora que estuvo realizando entrevistas en esos departamentos.

Fuentes del Palacio de Justicia de Benalúa señalaron que desde el viernes se han tenido que suspender al menos seis juicios con presos, por la imposibilidad de hacer el traslado debido a la cuarentena. Ayer en la Audiencia había señalados dos juicios con tres acusados en prisión que tampoco han podido comenzar. «Hemos hecho muchos esfuerzos para volver a cuadrar las agendas de los juzgados para ponernos al día tras los meses de parón por el estado de alarma. Así difícilmente vamos a poder ponernos al día», se lamentaban desde el Palacio de Justicia. Las causas con acusados en prisión preventiva pendientes de juicio tienen señalamiento preferente y están consideradas como urgentes.

En las próximas semanas se hará un estudio sobre la incidencia de los nuevos retrasos, pero entre los juicios de futuro incierto se encuentra el conocido como el crimen de la «viuda negra» que debía comenzar el lunes con un jurado popular a Conchi M V. y su cuidador Francisco P. O. por la muerte a puñaladas del marido de la primera en la Albufereta en agosto de 2018. El segundo de los acusados se encuentra en uno de los cuatro módulos aislados de la prisión de Villena. La cuarentena a estos presos terminaría este fin de semana, pero todo depende de que en los próximos días no haya contagios. El tribunal no ha tomado aún ninguna decisión y está a la espera de la evolución de este brote.

El presidente de la Audiencia, Juan Carlos Cerón, señaló que estos traslados de cárcel a los tribunales suponen un riesgo, tanto para los policías, como para las personas que intervienen en estos juicios. Sin embargo, las comunicaciones por videoconferencia con la prisión tampoco están solventando esta situación. En el juicio suspendido ayer por un caso de violencia machista, el aislamiento no permitía el traslado del preso al módulo donde se encontraba el dispositivo de comunicaciones porque se trataba de uno de los módulos no aislados y había riesgo. Al procesado se le pedían nueve años por encadenar a su pareja y amenazarla con una espada medieval en San Vicente tras una discusión.

Mal sonido y largas esperas

Fuentes judiciales señalaron que los magistrados se están quejando porque cada vez se encuentran en más ocasiones con que los sistemas están funcionando mal y no se oye al preso cuando declara. Además, el hecho de que haya una sola sala en cada cárcel para todos los juzgados está causando listas de espera de más de cuatro horas. El Gobierno ha limitado también el uso de la videoconferencia desde la cárcel. En aquellos casos en los que la pena que se puede imponer sea superior a los cinco años de cárcel es obligatorio que el acusado esté presente en la sala de vistas.

Ayer tuvo que suspenderse otro juicio por estafa, aunque en esta ocasión el acusado estaba en libertad. Días antes comunicó a la sala que estaba pendiente de una prueba para saber si tenía el virus y hasta tener el resultado debía permanecer en aislamiento.