La responsable de la agencia desde la que se contrataron las vacaciones en Andorra en las navidades de 2009 de Sonia Castedo ha declarado que la exalcaldesa pagó el viaje en metálico y que no le dio factura en su día porque no se la pidió. La testigo ha declarado en el juicio por los presuntos amaños en la tramitación del Plan General de Alicante y por la que están acusados, entre otros, los exalcaldes Sonia Castedo y Luis Díaz Alperi así como el empresario Enrique Ortiz. La Fiscalía sostiene que el promotor pagó dos viajes a Andorra a Castedo en 2008 y 2009 por importe de 2.666 y 1.820 euros respectivamente.

La responsable de la agencia que tramitó las vacaciones del segundo de estos años ha dicho en la Audiencia que la mujer de Enrique Ortiz encargó un viaje para un grupo de 25 personas y que posteriormente acudió Castedo a la agencia para interesarse en sumarse a ese grupo y pagar la estancia. Vacaciones por las que, según ha explicado, dio un adelanto de 180 euros y luego abonó el resto. La testigo ha dicho que no entregó factura ni justificante alguno porque no lo pidió.

En el juicio ha declarado el suegro de esta testigo, José Juan Climent, que fue uno de los socios de la mercantil Dreamview que compró suelo para Enrique Ortiz en Agua Amarga para el fallido proyecto de la Ciudad de la Economía. Climent y su socio en esa empresa, José Francisco León, han declarado que accedieron a figurar como los socios por hacerle un favor a Ortiz y ocultar que era quien estaba detrás de las gestiones a fin de evitar que subiera el precio al conocerse que era suelo para un proyecto del promotor con la CAM.

También ha declarado a petición de las defensas Ángel Fenoll, el empresario que dio origen al caso Brugal y del que parte la pieza del PGOU. Fenoll ha dicho que las cintas que entregó en la Fiscalía para acreditar la existencia de sobornos en la contrata de basuras en el Ayuntamiento de Orihuela y que dieron origen al procedimiento no eran originales y estaban limpiadas y editadas. Una declaración con la que las defensas pretenden la nulidad de las escuchas telefónicas en las que se basa el caso. La Fiscalía ha pedido que se incorporen a la causa otras declaraciones de Fenoll en el marco del caso Brugal en las que había sostenido la veracidad de las cintas.