El análisis de las aguas residuales evidencia una mejora generalizada de la pandemia de covid en Alicante. La octava actualización del estudio impulsado por Aguas de Alicante y el Ayuntamiento reporta datos esperanzadores tras dos meses con valores preocupantes en el municipio: las cifras bajan como mínimo un tercio respecto a los picos registrados durante el mes de septiembre, cuando la incidencia acumulada (casos por cada 100.000 habitantes) también alcanzó su máximo tras el estado de alarma, con 175 contagios en la peor cifra registrada a mediados del pasado mes. Esa tasa está cerca de bajar de la barrera psicológica del centenar.

El estudio permite visualizar una evolución de la pandemia en la ciudad a partir de fotos fijas relativas a la toma de muestras en seis zonas de la ciudad, que al principio eran bimensuales y ahora semanales. Los datos arrojan un cambio de tendencia desde finales de septiembre, que se ha confirmado con los últimos registros del día 30, donde el valor máximo en toda la ciudad se queda en 10.000 ug/500 ml. Esta cifra corresponde a la Zona Norte, donde veinte días antes se registraba el triple de restos biológicos de coronavirus en las aguas residuales, con 29.000 ug/500 ml durante la segunda semana de septiembre.

La mejora de la situación no solo se da en la zona con un nivel más preocupante de Alicante, sino en todas las demás. De hecho, el siguiente registro -5.400 ug/500 ml- corresponde a la zona que va desde Benalúa, el Ensanche, Carolinas a Altozano (incluyendo el Hospital General, lo que puede distorsionar la comparativa con el resto de mediciones de la ciudad), donde se llegó a registrar un pico de 27.000 y ahora la cifra ha caído hasta las 5.400 ug/500 ml, lo que supone la más baja de toda la serie salvo en una muestra de principios de agosto donde la cantidad era tan menor que se consideraba despreciable.

En tercer lugar como zona con una mayor incidencia de covid según el análisis de las aguas residuales se sitúa el entorno que comprende barrios como Florida, Ciudad de Asís, San Blas, PAU 1 y 2 y Rabasa, donde el último registro se queda en 3.300 ug/500 ml, frente a las 10.000 que llegó a dar la muestra tomada en la segunda semana de septiembre.

El entorno de la Albufereta, como ha sucedido en todo el análisis que empezó a finales de julio, sigue presentando datos que demuestran el control de la pandemia entre sus residentes, con un último registro a finales de septiebre que se queda en las 2.800 ug/500 ml, similar a las registrados en toda la serie, salvo un pico que llegó a las 14.000.

En una situación privilegiada en estos momentos también se encuentra la zona conocida como «colector general», que comprende el Centro (hasta Alfonso el Sabio) y los barrios del litoral sur, donde el registro se quedó en apenas 1.200 ug/500 ml, frente a las 15.000 que llegó a marcar veinte días atrás, con un registro que se queda entre los más bajos de toda la serie.

Por último, Playa de San Juan pasa a ser la zona con mejores registros, arrebatándole el puesto a la Albufereta, ambas en el entorno litoral de Alicante. El último muestreo arroja la cifra más baja de todo el estudio incluyendo todas las zonas, salvo en aquellas tres mediciones del inicio en las que los valores fueron despreciables, técnicamente conocidos como por debajo de los límites de detección.