El futuro del faro del Cabo de la Huerta enfrentó ayer al bipartito de Alicante (PP y Cs) y a los grupos de izquierda de la oposición. Y todo porque el gobierno local, liderado por Luis Barcala, reconoció que recuperar el uso público del faro del Cabo de la Huerta no está hoy en su agenda. «Tenemos ahora otras prioridades», admitió ayer el portavoz del bipartito, Antonio Manresa, al ser preguntado por la decisión del Ayuntamiento de no presentar una solicitud de concesión alternativa a la propuesta de un negocio de restauración, que fue finalmente la adjudicataria de la explotación de la infraestructura, catalogada como Bien de Interés Cultura (BIC), por un periodo 15 años, prorrogables por 5 más. Desde el bipartito dejaron ayer en manos de la Generalitat el permiso definitivo para el proyecto, ya que será necesario el visto bueno autonómico a la petición de licencia de obras que se tramitará desde Urbanismo.

Desde la izquierda municipal criticaron ayer al bipartito por abandonar el patrimonio municipal en manos privadas y por delegar de nuevo en el Gobierno autonómico. «Echamos de menos un Ayuntamiento con propuestas y no como hace siempre, que es decir que es competencia de otras administraciones», señalaron los socialistas, que reclamaron ayer al bipartito que convoque la comisión Puerto-Ciudad para tratar el futuro del faro del Cabo de la Huerta y también del situado en Tabarca. Desde Unidas Podemos se sumaron a los reproches por «no asumir su responsabilidad y poner el foco en otros gobiernos». Mientras, desde Compromís lamentaron que el gobierno de Barcala no recogiera el testigo de presentar un proyecto alternativo al uso hostelero. El asunto fue abordado en el pleno municipal del mes de junio. Petición a Barcala en redes

Por otro lado, el alcalde, Luis Barcala, lleva días recibiendo en sus perfiles en redes sociales cientos de mensajes de ciudadanos en los que le reclaman que dé un paso adelante para «salvar el faro» del Cabo de la explotación privada.