La consellera de Sanidad, Ana Barceló, quiso reunirse ayer con alcaldes de los municipios que atiende el Departamento de Salud de Torrevieja y también con representantes del comité de empresa y de la Junta de Personal. Lo hizo una vez acabada su comparecencia ante los medios de comunicación para informar de la extinción del contrato con Ribera Salud para la gestión sanitaria de ese departamento. Ambas reuniones, por separado, tuvieron lugar en el Auditorio Internacional y fueron muy tensas, según explicaron sus asistentes. Los ánimos estaban muy caldeados al no haber sido invitados antes del anuncio ni empleados ni regidores.