«Debemos preguntarnos cuál es nuestra obligación como sociedad civil frente a la pandemia. No podemos limitarnos a echar la culpa al Gobierno sin pensar en nuestra responsabilidad», argumentó el presidente de la Fundación Garrigues, Antonio Garrigues Walker. El problema, prosiguió, es que en España la sociedad civil «está muy poco organizada y es muy poco valiente», lo que repercute en la «calidad democrática, que empieza a descender, y también en la calidad económica».

Por su parte la vicepresidenta de Ellis (European Laboratory for Learning and Intelligent Systems) Nuria Oliver puso sobre la mesa la «falta de empoderamiento» de la sociedad civil durante la primera ola de covid y cómo los mensajes durante el discurso oficial pecaban de «paternalistas» en lugar de explicar cómo se transmite el virus de forma clara y confiar en que la sociedad tomaría las decisiones adecuadas para su contención.

El prestigioso jurista y la ingeniera alicantina dialogaron este miércoles sobre la sociedad pre y poscovid, la denominada cuarta revolución industrial y la evolución de la Inteligencia Artificial en el primer foro 4Estaciones organizado por el Club INFORMACIÓN y patrocinado por el Banco Sabadell.

"Falta empoderamiento de la sociedad civil, los mensajes durante la pandemia han sido demasiado paternalistas"

Nuria Oliver - Vicepresidenta de Ellis

 Al encuentro asistieron de forma presencial unas 50 personas al estar limitado el aforo por las restricciones impuestas por el coronavirus, pero también se pudo seguir en streaming y quien lo desee puede verlo completo en la web «club.diarioinformacion.com».

La consellera de Innovación, Universidades, Ciencia y Sociedad Digital, Carolina Pascual, acudió al evento, al igual que la directora regional del Banco Sabadell, Ana Ponsoda, el director del despacho de Garrigues en Alicante, Juan Antonio Pacheco, y los socios Álvaro Beltrán e Inés Abad. También el rector de la Universidad Miguel Hernández de Elche (UMH), Juan José Ruiz, y el presidente de Ineca, Rafael Ballester, entre otros.

Oliver y Garrigues reivindican el papel de la sociedad civil frente a la pandemia

Oliver y Garrigues reivindican el papel de la sociedad civil frente a la pandemia

Oliver y Garrigues reclamaron también liderazgo político en la situación actual. «Nadie quiere ser líder porque la gestión de la situación es muy complicada y saben que el fracaso les afectaría», afirmó Garrigues. «No les pedimos que sepan todas las respuestas, pero podían decirnos estoy aquí y me voy a apoyar en la ciencia y en gente capaz para aportar soluciones», añadió. «Los propios políticos quieren politizar la pandemia» y en este sentido, el jurista advirtió de que la respuesta es «no juegue usted con mi salud, su obligación es llegar a acuerdos». La única excepción «maravillosa» a esta situación la encuentra Garrigues en Portugal, «donde siete partidos han sido capaces de llegar a acuerdos y tomar las riendas y están convirtiendo a ese país en un lugar muy atractivo en todos los ámbitos».

"No podemos limitarnos a echarle la culpa al Gobierno sin pensar en nuestra responsabilidad como sociedad"

Antonio Garrigues - Presidente de la Fundación Garrigues

Aún así y con la positividad de la que ambos hicieron gala y que también exigieron a los medios de comunicación, Oliver quiso destacar la implicación de la sociedad civil en la lucha contra el covid que ella misma abandera como comisionada de la Generalitat. La ingeniera de Telecomunicaciones recordó la labor que realizan en el análisis de datos de movilidad, predicción de la curva epidemiológica, de modelos predictivos de hospitalización y la encuesta ciudadana que se ha convertido en una de las más completas y seguidas de Europa. Con todo ello aportan información real al Consell que ayude en la toma de decisiones. A raíz de algunos datos significativos de esta encuesta como el hecho de que el 40% de los participantes admiten que no podrían guardar una cuarentena en casa o que a la mitad le da miedo ir al médico con el impacto que esto puede suponer en la salud, surgió también la desiguladad de género porque las mujeres jóvenes con hijos reportan tenerlo más difícil que los hombres para aislarse en caso de dar positivo. 

En este sentido, el presidente de Garrigues durante más de 50 años alabó el avance de la mujer en la vida profesional y cómo se ha avanzado contra la desigualdad. «Cuando yo empecé la mujer apenas contaba en la vida pública y hoy en el despacho, que cuenta con unos 2.000 abogados, la mayoría son mujeres», destacó. Asimismo, valoró que en el departamento de Derecho Digital es de los que atrae a más mujeres porque ven que el futuro va por ahí.

"Mientras debatimos sobre si la IA superará a la inteligencia humana ya nos están manipulando con la que hay"

Nuria Oliver - Vicepresidenta de la Fundación Ellis

Sin embargo, la también doctora por el MIT, muy implicada en la reducción de la brecha de género en el mundo digital y en la incorporación de las niñas y jóvenes a las carreras científicas, matemáticas y tecnológicas, recordó que las mujeres sólo son el 12% de los matriculados en Ingeniería Informática. «Vivimos en una sociedad altamente tecnológica, las empresas más poderosas del mundo son tecnológicas, es el sector que va a crear empleo bien remunerado y que va a decidir el futuro y no hay mujeres ni para solucionar problemas ni para crear oportunidades», criticó. Además, el 58% de las mujeres que trabajan en el sector tecnológico lo deja por «la cultura misógina y machista» que impera en las tecnológicas, denunció. Tras escuchar esta realidad, Garrigues admitió que «hay que afrontar este problema» como sociedad. 

La irrupción de la Inteligencia Artificial y cómo repercute en nuestra vida fue el eje sobre el que giró la segunda parte del diálogo. El jurista alertó de la pérdida de la capacidad para comunicarse y entablar relaciones en el mundo real que sí fluyen en el mundo digital, así como del problema de la soledad aunque por el peso que aún tiene la familia en la sociedad española es mucho menor que en otros países, especialmente en Reino Unido y Estados Unidos. No obstante, abogó por incluir el fenómeno, que se ha visto agravado por el coronavirus, en el «debate intelectual». 

"No juegue usted con mi salud [a los políticos], su obligación es llegar a acuerdos"

Antonio Garrigues - Presidente de la Fundación Garrigues

Oliver realizó un repaso por la historia de la Inteligencia Artificial y los factores que han confluido para su despegue estos últimos años. Para la investigadora está claro que «sin la IA no vamos a poder sobrevivir como especie» pero alertó de que «no está garantizado que su impacto vaya a ser positivo». En este punto, Garrigues señaló el temor social a que los robots superen gracias a la IA la inteligencia humana y nos dominen, lo que se conoce como «singularidad». El jurista ironizó con que «tampoco es para tanto que superen la inteligencia humana visto lo visto», pero Oliver aprovechó el tema para alertar de uno de los grandes peligros de nuestro tiempo. Explicó que existen tres niveles de competencias en la IA. En el que estamos, la IA específica, las máquinas son capaces de «ser muy buenas, mejor que los humanos, en tareas concretas». En el segundo, del que «estamos lejos» los sistemas se equipararían a la inteligencia general comparándola con las inteligencias múltiples humanas y en el tercer nivel las superarían y se escaparía al entendimiento humano. El problema es que mientras debatimos sobre estos futuribles, «con la que funciona en estos momentos, la específica, ya nos están manipulando, influenciando en nuestras decisiones e incluso en procesos electorales». «El principio ético fundamental de la autonomía humana, ser libres en nuestras propias decisiones y acciones, ya está siendo violado constantemente por los algoritmos», advirtió. De ahí la importancia de un plan estratégico de IA y de la educación. Porque quizá, planteó Oliver, «está en el propio interés de las tecnológicas desviar la atención».