Los ex ediles del Partido Popular en el Ayuntamiento de Alicante Andrés Llorens y Juan Seva han declarado esta mañana en el juicio por los presuntos amaños en la tramitación del Plan General de Alicante que la retirada del planeamiento aprobada por el pleno no fue por sospechas de corrupción. Los dos ex concejales han sido citados por la defensa de Sonia Castedo; Ignacio Gally. Ambos han coincidido en señalar que el Ayuntamiento desistió en la tramitación del plan dado que habían pasado cinco años desde su aprobación y la realidad de la ciudad era otra. "La situación económica había cambiado por la crisis y había otra normativa", ha explicado Juan Seva. Por este motivo, se propuso la retirada del planeamiento. Los dos ex ediles han señalado que el pleno rechazó una enmienda de Esquerra Unida para que se hiciera constar que otra de las causas del desistimiento fueron las sospechas de corrupción que pesaban sobre el planeamiento.  

Los dos ex ediles han negado haber recibido cualquier presión o indicación por parte de Sonia Castedo o de Luis Díaz Alperi para cualquier votación sobre el Plan General. 

Andrés Llorens a su llegada hoy a la Audiencia de Alicante. ALEX DOMÍNGUEZ

Asimismo ha declarado por videoconferencia desde Madrid el exdirector general de la CAM Roberto López Abad para ser preguntado por un correo electrónico enviado el 27 de diciembre de 2006 a los servicios jurídicos de la caja para valorar el convenio sobre la operación Agua Amarga. López Abad ha negado tener información privilegiada del futuro planeamiento urbanístico de la ciudad y ha enmarcado ese correo al proceso para dar salida al suelo que obtuvo la caja como consecuencia del concurso de acreedores de la empresa Kelme. López Abad ha señalado que había mucho interés por parte de la Generalitat en la supervivencia de la empresa.

Asimismo, está declarando Javier Llorens, uno de los empleados de confianza de Ortiz, al que se le interroga por las escuchas en las que aparece hablando con el promotor sobre planos durante la tramitación del Plan General. Llorens ha asegurado que toda la información de la que disponían era información interna de la empresa basándose en datos que ya eran públicos.