Preocupados por cuidar el planeta, informados sobre igualdad de género o conocedores de las causas de la pobreza. Es la radiografía que muestra el Informe PISA del estudiantado valenciano de 4º de la ESO. Lo hace en sus resultados sobre las «competencias globales», una categoría que aparece por primera vez en el estudio más habituado a hablar de Matemáticas o comprensión lectora.

Estas competencias están definidas como «la capacidad que aúna el saber examinar cuestiones locales, globales e interculturales; comprender y apreciar distintas perspectivas; saber interactuar de forma respetuosa con los demás, y emprender acciones ara el bien común y el desarrollo sostenible». En estas, el alumnado valenciano se encuentra de manera mayoritaria ligeramente por debajo de la media española, pero con varios puntos por encima de la media de la OCDE.

En el índice que PISA utiliza para medir este desempeño global sobre cuestiones como las guerras, la pobreza o el medio ambiente, la Comunitat Valenciana obtiene 506 puntos, seis por debajo de la media de España y a 28 de la primera posición de Castilla y León. Sin embargo, está 32 puntos por encima de la media de la OCDE y al nivel de Croacia y justo por encima de países como Letonia, Israel, Lituania y Grecia.

En los últimos resultados publicados por PISA, el alumnado valenciano de 15 años estaba por debajo de la media española y de la OCDE en Matemáticas y Ciencias, unos datos que significaban un descenso de 4,5 puntos en Matemáticas y hasta 9,5 puntos en Ciencias. En este informe, que se basa en los exámenes realizados en 2018, la situación es distinta al valorar otras cuestiones y al mostrar a la juventud valenciana como más empática y preocupada socialmente que la de otros países.

En asuntos más concretos, por ejemplo, el porcentaje de estudiantes valencianos de 4º de la ESO que asegura estar informado sobre igualdad de género es del 90,6 %, un punto por debajo de la media estatal (91,7 %), pero por encima del resto de países que integran la organización (el segundo es Portugal con 88,8 %) y siete puntos por encima de su media.

Concienciados con el clima

El cambio climático es otro de los asuntos que muestran un porcentaje alto de concienciación por parte del alumnado valenciano. El 83,3 % de ellos está de acuerdo en la afirmación de que cuidar el planeta es un asunto importante para ellos, un 0,2 % menos que la media estatal, pero tres puntos por encima que la del total de países de la OCDE, aunque lejos del primero en la lista, Portugal (94 %). En España ese puesto es para Canarias (86 %).

El estudio sobre estas «competencias globales» deja otros datos significativos como que la juventud valenciana examinada se considera en un 89 % «ciudadana del mundo», un 72,5 % sentía cierta responsabilidad de hacer algo cuando ve las condiciones negativas en las que vive la población en otros países, un 62,6 % creía que su comportamiento puede tener un impacto en las personas que viven en otros lugares, un 70,4 % sabía sobre asuntos de salud global como epidemias, un 81,6 % decía estar informado sobre el hambre y la malnutrición en otras partes del mundo y otro 78,5 % indicaba estarlo sobre las causas de la pobreza.

Una juventud respetuosa y abierta con el resto de culturas

El estudiantado destaca por saber adaptarse a situaciones y actuar bajo presión

El informe PISA sobre la competencia global retrata a la juventud valenciana como respetuosa y abierta a la comunicación intercultural con personas que hablan en su lengua nativa.

Según las respuestas del alumnado de 4º de la ESO, la mayoría del estudiantado valenciano actúa con cautela e intentando escuchar y explicar de la manera más sencilla a su interlocutor si este no se comunica con el mismo idioma. Ante estas situaciones, el 82 % de los quinceañeros valencianos asegura que observa «atentamente» las reacciones de su interlocutor, el 86,8 % dice comprobar si la otra persona le está entendiendo, el 88 % indica escuchar atentamente lo que la otra persona dice y el 81,4 % señala dar ejemplos concretos para que se le entienda mejor.

Estos datos van en línea con los resultados españoles sobre la perspectiva del estudiantado sobre otras culturas (unos datos que no están desagregados por territorios). El 88,6 % de los examinados en España declaraba respetar los valores de las personas de otras creencias y un 87,1 % afirmaba valorar sus opiniones. Ambos datos están por encima de la media de la OCDE, en 9 y 10 puntos. El alumnado español también destaca por la capacidad de adaptarse a nuevas situaciones. Un 70 % asegura poder lidiar con situaciones inusuales (por un 58 % del resto de países), un 75,7 % expresa poder adaptar su comportamiento a para resolver nuevas situaciones (67 % media OCDE) y un 64 % podía adaptarse a situaciones bajo presión por un 56,8 % del resto de países miembros.