La Generalitat no contempla intensificar las medidas restrictivas que entraron en vigor en el territorio valenciano el pasado sábado con la instauración del toque de queda pese a la declaración del estado de alarma en toda España. El Consell considera que la medida anunciada ayer por el Gobierno supone un aval a las decisiones adoptadas.

En esa línea, el gobierno que preside Ximo Puig también descarta el cierre de las comunicaciones con las comunidades autónomas vecinas. La decisión sobre la suspensión de la movilidad entre autonomías pasa a ser autonómica en este momento según anunció el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pero el Consell no ve necesario aplicarla al menos por ahora. También mantiene el Consell la capacidad de decretar confinamientos de municipios en función de la situación de la epidemia y la adopción de medidas más restrictivas como ha ocurrido en algunas localidades como Benigánim, Orihuela, Onda o Guadassuar.

El estado de alarma confiere a la Generalitat una base legal sobre la que actuar, pero no hay previsión de aplicar nuevas medidas a las ya dictadas el sábado

La Generalitat entiende que el nuevo marco anunciado por Sánchez para los próximos meses es un aval para el toque de queda y las restricciones valencianas, pero seguirá esperando el pronunciamiento del Tribunal Superior de Justicia.

Fuentes del Consell añaden que el estado de alarma confiere a la Generalitat una base legal sobre la que actuar, pero no hay previsión de aplicar nuevas medidas a las ya dictadas el sábado.

El toque de queda puede levantarse antes de mayo



El Gobierno tiene intención de que el estado de alarma se mantenga hasta el próximo mes de mayo, pero ello no obliga necesariamente a que el toque de queda decretado en la Comunitat Valenciana alcance también esa fecha. Fuentes del Consell señalaron que las medidas valencianas se mantendrán mientras sea necesario, pero no están vinculadas en plazos al estado de alarma. La medida decretada por el Gobierno sí supone una base jurídica para que el Consell pueda tomar sus propias decisiones. «Tener el estado de alarma hace que todo sea más práctico», señaló ayer una fuente. c.alós valència

El toque de queda a las 00 horas

En Presidencia de la Generalitat se respiraba ayer cierta satisfacción, porque las medidas anunciadas por el Gobierno bajo el paraguas del nuevo estado de alarma coinciden con las puestas en marcha unas horas antes en la Comunitat Valenciana con el toque de queda anunciado el sábado.

Pero hubo una, no obstante, que se ha tenido que pelear: la posibilidad de que los establecimientos de restauración valencianas puedan cerrar en la medianoche. La idea inicial del Ejecutivo central era establecer una regla general de fin de la actividad comercial a las 23 horas.

Al final, transigió para dar una hora de margen a las autonomías en la aplicación de la norma marco. Eso supone que la Generalitat no tenga que modificar los criterios que había decretado unas horas antes. Presidencia esperaba en la tarde ayer la publicación oficial de la resolución del estado de alarma para la emisión de un decreto valenciano que adapte las nuevas disposiciones a la situación valenciana.

Las informaciones recibidas en el Palau antes de la comparecencia de ayer de Pedro Sánchez indicaban que el Gobierno central estaba preparando una declaración de estado de alarma para «un periodo lo más largo posible», pero se desconocía que pudieran ser seis meses.

En todo caso, el plan de actuación que se marca el Consell es ir ajustando las restricciones a la evolución de la pandemia. Por ahora, se quiere hablar poco de Navidad y Fallas en sede presidencial. «Queda bastante. Habrá que ir viendo», señalaban ayer fuentes oficiales, si bien admitían que la situación es complicada de cara a la celebración normal de estas fiestas. La mirada se quiere centrar en el 9 de diciembre, la fecha límite para el toque de queda en la Comunitat Valenciana.

Puig pide participar en el reparto de fondos de la UE


El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, expresará hoy en la Conferencia de Presidentes la voluntad de la Generalitat Valenciana de participar de forma activa tanto en el diseño como en la aplicación de los fondos europeos para la recuperación económica.


Ayer, Puig mantuvo una reunión con el conseller de Hacienda y Modelo Económico, Vicent Soler, quien destacó que el presidente expondrá en la reunión, en la que participa por primera vez la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von Der Leyen, las principales líneas de actuación recogidas en la Estrategia Valenciana para la Recuperación.


Un plan, remarca Soler surgido de los acuerdos con agentes sociales, administraciones públicas y grupos parlamentarios de las Corts y que recoge 400 iniciativas «alineadas con los objetivos de Bruselas, la digitalización, la sostenibilidad y la resiliencia».


Según el conseller, los objetivos que se perseguirán «una vez superada la emergencia sanitaria» son «tanto reforzar la economía como el estado del bienestar». Para lograr estos objetivos, Puig defenderá una nueva cogobernanza europea y planteará que las regiones europeas tengan un papel relevante.


Mientras, el líder de Ciudadanos (Cs) en la Comunitat Valenciana, Toni Cantó, aseguró ayer que el toque de queda y las nuevas restricciones son medidas «cosméticas» y abogó por aprobar un plan de medidas sanitarias y económicas para «frenar el aumento de los contagios y paliar la crisis en los sectores afectados».


Mientras, el Partido Popular de la Comunitat Valenciana ha exigido «blindar» la sanidad pública «frente a un PSOE que está echando a la calle a quienes salvan vidas» y alertó de que «quienes han salvado miles de vidas durante esta pandemia, ahora se enfrentan sin recursos a la nueva ola».