El alcalde de Alicante, Luis Barcala (PP), pasará por encima del criterio del interventor municipal, Francisco Guardiola, para intentar desbloquear la construcción del nuevo colegio de El Somni en una parcela del PAU 2. Así lo anunció este jueves durante la celebración del Debate sobre el Estado de la Ciudad. Esta decisión de Barcala puede acabar con el asunto judicializado, ya que el alto funcionario dispone de herramientas legales a su disposición para defender su posición, como interponer un recurso contencioso-administrativo ante los juzgados. Este escenario es nuevo en Alicante.

Barcala tiene previsto firmar en «breve» una resolución oficial para «salvar los reparos» que pone el alto funcionario, contrario a que el Ayuntamiento asuma trabajos que -bajo su criterio- debería quedar en manos de funcionarios de la Conselleria de Educación. Y lo hará, en una decisión inédita en Alicante, amparándose en informes de la Asesoría Jurídica del Ayuntamiento y de la Secretaría General. «Encargué sendos informe y ambos afirman que el interventor no tiene razón. En base a esos informes, no me queda otra alternativa para desbloquear el proyecto que salvar los reparos que pone Intervención», explicó el alcalde a preguntas de este diario. Esta decisión no tiene precedentes en el Consistorio alicantino, según añadió Barcala: «El interventor sostiene que el Plan Edificant de la Conselleria de Educación no cubre la totalidad de los gastos que genera. Por tanto, defiende que la delegación de competencias no puede hacerse efectiva porque hay gastos que tenían que estar transferidos y no se hace así. Y de ahí no se le saca».

El interventor, según Barcala, es la primera vez que se opone en rotundo a dar el visto bueno a un proyecto del Plan Edificant en Alicante, aunque en anteriores ocasiones también evidenció su criterio en contra de que el Ayuntamiento tenga que asumir con su personal municipal parte de los trabajos administrativos necesarios para realizar mejoras en centros educativos. Fuentes municipales recuerdan que el alto funcionario ya emitió un duro informe en contra de la delegación de competencias para la construcción del colegio de La Cañada (cuya obra está pendiente), aunque en ese caso no fue necesario que Barcala tuviera que salvar reparos. En esta ocasión, con el centro de educación especial de El Somni, el interventor ha ido un paso más allá. «Hemos llegado a un punto de no retorno. No hemos conseguido convencerle ante los reparos que pone», añade el regidor popular, quien subraya que es la primera vez que un alcalde va a tener que dar este paso para desbloquear un proyecto: «Los técnicos no encuentran precedentes, nunca había pasado en el Ayuntamiento de Alicante. He tomado esta decisión seguro de que tengo razón, los informes de Asesoría Jurídica y Secretaría General me avalan», resaltó este jueves después de finalizar el Debate sobre el Estado de la Ciudad, donde adelantó su decisión para impulsar el proyecto.

Hoy está prevista la celebración de una comisión municipal previa a un próximo pleno durante este mes de noviembre en el que el Ayuntamiento tendrá que asumir la delegación de competencias. Este paso es necesario para que la Conselleria de Educación transfiera a las arcas municipales los 5,7 millones de financiación necesarios para llevar a cabo el proyecto.