La plaza del Ayuntamiento de Alicante acogió este lunes una protesta contra la Ordenanza de Mendicidad y Prostitución, ahora conocida como Ordenanza de Convivencia Cívica. En la protesta estaba representada una veintena de colectivos sociales, además de los tres grupos de izquierda con representación en el Pleno municipal (PSOE, Unidas Podemos y Compromís).
A través del manifiesto, leído por Jesús Fernández de HOAC, los colectivos sociales rechazaron el documento que previsiblemente se aprobará en el pleno de diciembre. «Manifestamos nuestro rechazo y disconformidad con la ordenanza municipal por favorecer el uso discriminatorio de los espacios de la ciudad y criminalizar la mendicidad y la prostitución», señala el manifiesto, en el que se añade que «las medidas coercitivas son las herramientas menos adecuadas para lograr la protección e inclusión social de colectivos vulnerables». Además, para las asociaciones convocantes «la imposición de sanciones [que pueden alcanzar hasta los 3.000 euros] solo logrará penalizar más a estas personas y colectivos con graves dificultades, y darles un trato como si de delincuentes se tratara».
La protesta estuvo secundada por entidades como la Plataforma contra la pobreza, Banco de Cuidados de Alicante, HOAC, Centro Loyola, Comunidades Cristianas Populares, Plataforma Feminista de Alicante, los sindicatos CC OO y UGT, Solidaridad Internacional, la Plataforma de la Dependencia de Alicante, Entrepobles, Emergencia Feminista, Talatay Nder, el grupo de Cooperación del Colegio de Enfermería de Alicante, Reacción Solidaria y las Parroquias San Gabriel, y Beato Francisco Castelló.
Además, también asistieron a la protesta representantes de los tres grupos de izquierda en el Ayuntamiento de Alicante. El portavoz socialista, Francesc Sanguino, señaló que «es una ordenanza contra las personas más vulnerables»; para la edil Vanessa Romero (Unidas Podemos) la «ordenanza de vagos y maleantes lo que hace es criminalizar a las personas más vulnerables de la sociedad» y para el portavoz de Compromís, Natxo Bellido, el texto «no aporta soluciones y solo pretende esconder la pobreza».
Preguntado por la protesta de los colectivos sociales frente al Ayuntamiento, el alcalde de Alicante, Luis Barcala, anunció ayer que el bipartito prevé aprobar «en las próximas semanas el Plan de Inclusión, que da solución a los problemas sociales en su conjunto». Para el bipartito, según Barcala, «el plan es prioritario y por eso va por delante de la ordenanza». Fuentes municipales concretaron que el Plan de Inclusión Social irá al pleno de diciembre, misma fecha prevista que para la Ordenanza de Convivencia Cívica, que se inicialmente se llegó a anunciar para la sesión ordinaria de noviembre, que se celebra este jueves.
