La provincia está abocada a una tercera ola de coronavirus si optamos por relajarnos estas navidades y dejamos de mantener las distancias que exigen las medidas anticovid. La alerta parte de profesionales a pie de las UCI en la provincia y expertos en proyecciones matemáticas.

«Las tasas de incidencia son muy elevadas, aunque estén por debajo de los 500 casos por 1.000 habitantes. Hemos aceptado que tener 300 casos cada dos semanas no es tan malo, pero hay que recordar que aspirábamos a que fueran de 25 a 50 los casos, y los multiplicamos por cinco», advierte el doctor Félix Gutiérrez desde la UCI del Hospital General de Elche.

El virus no ha perdido virulencia y los que contagiamos somos las personas «que podemos llevar la muerte a otros», subraya Gutiérrez, para quien no sería de recibo que esta Navidad cometamos el mismo error que en verano, rebajando la alerta y las medidas de distanciamiento. «No se puede hablar de agrupamientos sociales en contraste con el distanciamiento, las consecuencias pueden ser devastadoras», reitera.

El doctor Francisco Jaime, jefe de Medicina Intensiva del Hospital General de Alicante, corrobora que como « la incidencia va bajando, la gente tiene la sensación de que podemos relajarnos, pero la ocupación en la UCI sigue alta. La recuperación de los enfermos más graves puede tardar semanas y si no extremamos las medidas de precaución se pueden acumular pacientes a los previos y elevar la presión hospitalaria en unas fechas, de por sí, sensibles».

Los expertos vaticinan una tercera ola si no se respetan las restricciones en Navidad

Que las muertes provocadas por el covid caerán a la mitad para final de año son las previsiones que maneja el profesor de Estadística e Investigación Operativa de la Universidad Miguel Hernández de Elche (UMH) Santiago García Cremades, que ha realizado las proyecciones con los datos de la Conselleria de Sanidad a petición de INFORMACIÓN.

Tras cerrar noviembre como el segundo mes más negro en víctimas mortales de toda la pandemia con 220 fallecidos en la provincia y 9.191 en toda España la tendencia puede por fin revertirse. Eso sí, según puntualiza el matemático, «siempre y cuando se mantengan las medidas». «Si la situación se descontrola y la ciudadanía no cumple las restricciones los datos serán distintos», advierte el experto. De manera que esta proyección matemática servirá en enero para saber si hemos cumplido como sociedad con los controles marcados por las autoridades sanitarias durante las fechas navideñas y sus preparativos. García Cremades explica que ha agrupado por semanas los fallecimientos para poder hacer las medias porque en noviembre se han producido varios picos de subida de decesos en días concretos. Así, durante el mes que acaba de terminar las muertes se sitúan en una media de 13,43, mientras que si las medidas se cumplen esta cifra caería a la mitad, en una horquilla que va desde las cuatro a las nueve muertes en función de si el escenario es más o menos optimista. «Aún no conocemos las medidas concretas que se decretarán a partir del día 9 y es imposible calcular la movilidad y los encuentros familiares y sociales de los días navideños», puntualiza García Cremades. La provincia se situaría de aquí a final de año mejor que la media de la Comunidad Valenciana. «En Alicante la curva está clara, pero cuando vemos los datos de la Comunidad en su conjunto existe una mayor variabilidad», afirma.