De los 268.218.111 de euros a los que asciende el borrador del Presupuesto para 2021, un 92,77% queda en manos del PP, mientras que apenas el 6% está gestionado por Ciudadanos. El resto de las partidas son relativas a gestión interna del Ayuntamiento. Este reparto de fuerzas no es nuevo, ya que se deriva de la distribución de concejalías que se hizo en el pacto de gobierno tras las elecciones de 2019. Pero sin ser nuevo, sí que evidencia el peso de cada socio en una cuestión clave como es la gestión presupuestaria. Y todo porque ese desequilibrio, lejos de atenuarse, tiende a lo contrario. De hecho, de no producirse cambios en el borrador que presentó esta semana el alcalde, Luis Barcala (PP), y la vicealcaldesa, Mari Carmen Sánchez (Cs), los populares seguirán aumentando la brecha, al crecer 1,14 puntos, frente a los 0,33 puntos que suben las áreas de los naranja.
Los populares sustentan su control presupuestario en áreas como Recursos Humanos, donde se concentran más de 107 millones, seguida de concejalías desde las que se gestionan las grandes contratas, como Limpieza y Medio Ambiente, que incluye 19,2 millones para la recogida y tratamiento de residuos, 18 millones para la limpieza y 6,1 millones para el mantenimiento de zonas verdes. Otra área determinante en el control presupuestario popular es Infraestructuras y Mantenimiento, que supera los 30 millones, con partidas como los 11 millones para la limpieza de colegios y dependencias municipales, junto a los 4,2 millones para el alumbrado público o los dos millones para el suministro de energía a dependencias municipales, además de otros dos millones para la conservación de aceras y calzadas. Mucha trascedencia tiene también Tráfico y Transporte, que se convierte en una de las que más crecen, aunque con una subida que se basa en los seis millones de déficit del transporte urbano. Entre las áreas que más importancia cobran, y también como consecuencia de la crisis del covid, se sitúa Servicios Sociales, que aumenta casi un 15% por las ayudas directas y la asistencia domiciliaria.
Pese a todo, el área que más peso gana es Educación, aunque gracias a los fondos transferidos por la Generalitat para la reparación y construcción de cinco colegios en Alicante a través del Plan Edificant, que suman en total 1,6 de los 2,4 millones de toda la concejalía. En el otro lado se encuentran áreas que han cedido presupuesto, como Sanidad, que cae un 65% al no incluir mejoras en consultorios médicos como en 2020. En el furgón de cola también se sitúa Nuevas Tecnologías, que baja un 48%, y el Patronato de Vivienda, que se deja un tercio del presupuesto.
En Ciudadanos, dos son las áreas que mejoran su posición, con Turismo al frente, que en un intento de contener las consecuencias de la pandemia crece un 40%, rozando los 3,5 millones, seguida de Urbanismo, que sube un 8,43%, hasta los casi 6,6 millones. Por otra parte, dos concejalías que concentran las miradas son Inmigración e Igualdad, al situarse en el punto de mira de Vox, socio hasta ahora preferente del bipartito. Según el borrador, Inmigración mantiene las mismas partidas, mientras Igualdad se deja un tercio del presupuesto, al perder 100.000 euros para la promoción de la igualdad. Que no haya más cambios dependerá de la negociación entre Ciudadanos y la bancada progresista.
Ingresos: Un millón más en infracciones por la circulación
El borrador de las cuentas municipal de 2021, en el apartado de ingresos, incluye las estimaciones para las multas, entre otras partidas. La principal variación respecto a 2020 se da en las infracciones relativas a la ordenanza de circulación, donde los ingresos pasarían de 4,8 a 5,9 millones de euros. También crecen los ingresos por infracciones tributarias, donde las estimaciones pasan de 169.000 hasta los 350.000 euros. En el lado contrario del tablero se encuentran las multas por infracciones urbanísticas, que se espera que caigan durante el año 2021, desde los 123.000 a los 100.000 euros calculados en el nuevo Presupuesto que el bipartito prevé elevar a pleno antes de finalizar este año.
