Médico especialista en salud comunitaria. El doctor Bengoa ha trabajado en la OMS, ha asesorado a Obama y es una voz prestigiosa en gestión sanitaria. Ha participado en el Aula de la Ciencia de la UA y cree que las medidas deben mantenerse en Navidad para evitar que otra oleada golpee al ya frágil sistema.

Parece que estamos doblegando la segunda ola de la pandemia, pero todos los expertos están alertando ya de la tercera ola tras las fiestas navideñas, ¿es inevitable?

Sí, porque estamos intentando convivir con el virus en lugar de intentar erradicarlo. Por un lado tenemos mucha mortalidad, pero por otro intentamos hacer revivir la economía. Soltar lastre ahora y permitir que se abran bares y normalizar la situación crea condiciones favorables para que el virus vuelva a reinfectar, sobre todo en espacios cerrados. Así que es muy probable que tengamos una tercera ola, aunque no será con la misma agresividad que las otras. La parte negativa de esto es que damos por supuesto que los profesionales tienen la resiliencia para aguantar una ola tras otra.

¿Debería entonces haber más restricciones en Navidad?

Sí. La estrategia general recomendada por Madrid en las comunidades autónomas, sobre todo en las que tienen una incidencia acumulada alta, por encima de 200-250 casos, es que deberían endurecer las medidas generales acordadas.

El hecho de ver tan cerca la vacuna, ¿puede hacer bajar la guardia?

Debería ser al revés. Vamos a tardar meses en llegar a la inmunidad de rebaño. Habrá más personas protegidas y el virus tendrá más dificultades para extenderse a medida que se vaya vacunando a la población, pero la actitud y el comportamiento de las personas tiene que ser el mismo que si estuviéramos en la primera ola en relación al distanciamiento social y las mascarillas. Va a ser la suma de esas medidas individuales y la vacuna lo que nos va a permitir recobrar la normalidad antes. Si sólo vacunamos la normalidad se retrasaría.

¿Para cuándo prevé que se conseguirá la inmunidad de rebaño en España?

En otoño de 2021. Por eso hay que comprender que las medidas de protección individuales son complementarias a la vacunación. Cuanto más las respetemos mientras dure el periodo de vacunación más rápido nos podremos quitar todos la mascarilla.

¿Cree que con la vacunación masiva desaparecerá el covid o nos tendremos que vacunar cada año como de la gripe?

Es probable que nos sigamos vacunando por el comportamiento que tienen estos virus que como la polio, el sarampión y la gripe, son endémicos. Los conseguimos controlar gracias a la vacunación. Si dejamos de vacunar, como ocurrió en Francia con el sarampión el año pasado, el virus salta de nuevo a la palestra. Allí se dio una mortalidad infantil innecesaria porque los antivacunas convencieron a ciertas comunidades para no vacunarse.

Se necesitará inmunidad de rebaño en todo el mundo por la movilidad y eso va a tardar.

Creo que vamos a viajar todos con un certificado. La vacunación va a ser desigual, se va a vacunar antes el norte que el sur. Hasta que no esté todo el mundo vacunado necesitaremos probar que hemos sido vacunados cuando viajemos.

El sistema sanitario se ha puesto al límite con la pandemia, ¿será capaz de recomponerse?

El sistema de salud ha sido desestabilizado durante la pandemia, ha aguantado el mayor test de esfuerzo de su historia. Pero no podemos presuponer que ese sistema va a estar siempre igual oleada tras oleada, por lo que nuestro comportamiento en Navidad no debe ser sólo para no infectar a familiares y amigos sino para proteger al sistema de salud. Parece que como lo pagamos va a estar ahí siempre, pero los profesionales necesitan saber que el comportamiento de la ciudadanía en Navidad no se va a parecer al del verano.

¿Será necesario un plan de choque para recuperar los niveles de las listas de espera pre covid?

El año 2020-2021 no puede ser sólo el año de la vacunación, debe ser también el de la recuperación de todo lo no covid. Las pruebas de cáncer, de enfermedades renales, trasplantes, control de hipertensión, salud mental, todo ha sufrido un retraso aunque se ha compensado en parte con las teleconsultas. El año 2020-2021 tenemos que estar muy pendientes para compensar la desatención.

Teniendo en cuenta la situación de los profesionales y del propio sistema, ¿será posible hacerlo tan rápido o tardará unos años en normalizarse?

Es bueno que cada comunidad autónoma diseñe un plan organizado para contraatacar a las patologías no covid, más que un plan nacional. Ya están en ello, pero es necesario acelerar el paso y si tuviéramos una tercera ola es posible que mucha de esa actividad no covid no se pueda recuperar nunca.

Usted ha formado parte de la OMS que ha sido criticada durante la pandemia por la lentitud en tomar determinadas medidas y decisiones, ¿cree que se han hecho bien las cosas?

Cuando yo estuve sufrimos el SARS1. En esa época la directora general y mi jefa, la doctora Brundtland, que después fue primera ministra de Noruega, decidió que no podían salir aviones de Toronto ni de China, focos del SARS1, por peligro de pandemia. Los países no aceptaron una organización internacional con ese poder y capacidad de decisión y le cortaron las alas. Esta organización sólo puede ser lo que los países le permiten ser. Con la revisión que se está haciendo, creo que va a salir una OMS más fuerte y con más presupuesto, pero muy cambiada. Para que los republicanos de EE UU acepten volver, aunque gobierne Biden, va a hacer falta tomar decisiones serias sobre la agilidad de la OMS y su relación con los países ante un peligro pandémico.

También ha asesorado a Obama, ¿qué pensaba cuando veía a Trump quitándole importancia al virus y desoyendo a Fauci?

La gran paradoja en EE UU es que era el país mejor preparado del mundo para lo que llamamos eventos de baja probabilidad y alto impacto como esta pandemia, pero como estaba Trump y no permitió que se expresara la ciencia el modelo ha sido desastroso. Está todo dicho cuando uno ve que van a llegar a los 350.000 muertos en Navidad. La gran lección es que aunque tengas la mejor ciencia del mundo, ésta no sirve para nada si el liderazgo es pobre.