La oposición municipal en el Ayuntamiento de Alicante -integrada por el PSOE, Unidas Podemos, Compromís y Vox- han propuesto trasladar más de medio centenar de preguntas al gerente de la adjudicataria del servicio de limpieza viaria y recogida de residuos, UTE Alicante, tras su negativa a comparecer ante la comisión municipal que controla la prestación de un controvertido servicio, que se reunió por última vez el pasado 3 de diciembre.

En ese reciente encuentro, los seis grupos de la Corporación local acordaron enviar por escrito las preguntas tras el plantón del máximo responsable de la adjudicataria, formada por FCC, Ferrovial y el promotor Enrique Ortiz, quien alegó que su único canal de comunicación oficial con el Ayuntamiento de Alicante es a través del funcionario responsable del contrato, Sebastián Chicote, que intervino ante la comisión en la anterior sesión. Los grupos se dieron diez días de tiempo para remitir sus preguntas. Este lunes acabó ese plazo. Ahora la UTE tendrá hasta el 7 de enero para responder. La próxima reunión de la comisión se anunció para el 22 de enero.

Los grupos de Unidas Podemos y Compromís, además de sus cuestiones particulares, incluyeron casi una veintena de preguntas remitidas desde la Coordinadora Alicante Limpia (CAL), una plataforma ciudadana integrada por 16 entidades. Entre estas cuestiones se abordan problemas como la limpieza viaria, el uso de contenedores de grandes dimensiones, los supuestos recortes de personal en la plantilla, el uso de vehículos eléctricos, la recogida de los biorresiduos, el tratamiento de los residuos y el aprovechamiento energético.

Desde la coalición morada, dirigida por Xavier López, elevaron trece preguntas más sobre temas como el subparque proyectado en Playa de San Juan, la iniciativa piloto de la recogida selectiva puerta a puerta, la negativa a aceptar la auditoría de cuentas, los elementos de protección a la plantilla para los tratamientos de limpieza anticovid, el reciente incendio en el vertedero y la deficiente valoración ciudadana del servicio de limpieza, entre otras. Por su parte, desde la coalición naranja, liderada por Natxo Bellido, añadieron tres cuestiones más a las propuestas elaboradas por la CAL, referidas al actual pliego de un contrato que finaliza tras el próximo verano, a las «carencias» del servicio y los «retos» de cara a la próxima adjudicación.

Desde el PSOE, por su parte, elevaron quince cuestiones centradas, entre otros asuntos, en la vida útil del vertedero, en el absentismo de la plantilla, la asignación de personal a las distintas rutas de la limpieza viaria, junto al control realizado desde el Ayuntamiento. Por último, desde Vox, el grupo que propuso la alternativa de remitir las preguntas por escrito ante la negativa del gerente de UTE Alicante de comparecer ante la comisión municipal, enviaron cinco cuestiones, que giran en torno a la carga de trabajo por barrios, al protocolo de desinfección frente al covid de las calles, el programa de recogida de enseres y de restos de poda en las partidas rurales de la ciudad.

Fuentes del grupo municipal de Ciudadanos, socio del gobierno del bipartito, señalaron que no habían remitido preguntas a UTE Alicante. Por su parte, desde el PP, el grupo que dirige la Concejalía de Limpieza a través del concejal Manuel Villar, no contestaron.

La adjudicataria tiene de plazo hasta el 7 de enero para responder.