La Casa Cofrade “Soledad de Santa María” ha acogido esta tarde la I Entrega Solidaria de Juguetes que, bajo el lema “Un juguete, un sueño… con San Nicolás”, organizado por los hermanos cofrades de la Real y Muy Ilustre Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad de Santa María y de la Cofradía de San Pedro Apóstol.

El acto, que se ha celebrado en las dependencias de la nueva Casa Cofrade inaugurada recientemente por el obispo Jesús Murgui, ha contado con la presencia de niños y niñas de distintas edades, acompañados de sus padres, con las medidas preventivas frente al covid. Algo más de medio centenar de pequeños fueron los elegidos para recibir de manos del legendario San Nicolás los juguetes que con tanta ilusión esperaban desde hace varias semanas. 

La velada navideña, que han preparado por primera vez los cofrades de la Basílica de Santa María, ha estado llena de sorpresas. El acto dio inicio con una recreación literario-musical sobre la vida y los milagros del santo obispo de Mira que recaló por tierras alicantinas hace más de mil setecientos años. Acto seguido, los hermanos cofrades protagonizaron un recital poético alusivo a la Natividad de Nuestro Señor

 

Un obispo legendario 

San Nicolás ocupa un puesto preeminente entre los santos cristianos que gozan del favor popular por el encanto de leyendas que acrisolan su existencia. Entre ellas aparece el origen de una de las más queridas y enternecedoras tradiciones navideñas

San Nicolás nació a finales del siglo III en la ciudad de Pátara, capital de Licia, en el extremo meridional del Asia Menor y, desde que apenas abriera sus ojos a la luz, dirigió su alma al conocimiento de Dios. Del trato en la oración le vino aquella pureza de conciencia y entrega a los más necesitados. De muy antigua es la tradición que asegura que San Nicolás, nombrado obispo de Mira, repartía regalos a los niños y niñas mientras dormían. La muerte del santo fue muy sentida por las gentes de aquella época, de ahí que pronto la Cristiandad comenzase a erigir iglesias y monasterios bajo su advocación. La ciudad de Alicante lo eligió como patrón y honró con su nombre uno de sus principales templos, convertido siglos después en concatedral. 

San Nicolás, al fondo INFORMACIÓN

 

La entrega de juguetes y dulces 

Con el deseo de recuperar esta tradición que recorre buena parte del orbe cristiano, las Cofradías de Nuestra Señora de la Soledad y de San Pedro Apóstol han llenado de magia y emoción este 18 de diciembre. El santo, de luengas barbas blancas y ataviado con su tradicional indumentaria, fue recibido a las puertas de la Casa Cofrade a cuyo frente se encontraban las hermanas mayores Balbina Oncina y Carmen Iborra. 

Entre el público que se agolpaba en las inmediaciones de la avenida de Alcoy, llegó San Nicolás a las seis de la tarde y accedió al interior de las dependencias cofrades donde repartió los juguetes a los más pequeños. Acompañaba al santo una de sus más fieles seguidoras, Sila, quien se encargó de llamar a cada niño por su nombre y acompañarlo hasta el trono donde estaba sentado San Nicolás. 

En la velada no faltaron los dulces y golosinas que tanto fascinan a los niños y niñas. El acto finalizó con una emotiva foto de familia alrededor del legendario obispo de Bari. Poco antes de las nueve de la noche se despedía San Nicolás montado a lomos de su caballo blanco, mientras divisaba a lo lejos la ciudad de Alicante. Una larga travesía le espera durante los próximos días, pues debe seguir repartiendo mucha felicidad a todos los niños del mundo.