Los municipios con más población de la provincia de Alicante han decidido reforzar sus respectivos dispositivos policiales desde la noche de este lunes al martes para asegurar que se cumple el toque de queda adelantado, decretado en las 23 horas. En Alicante ciudad, según el Ayuntamiento, estaba previsto realizar controles policiales en distintos puntos, vigilándose las zonas de la hostelería y los locales de ocio para informarles en esta primera jornada de entrada en vigor de las nuevas medidas de seguridad.

La Policía Local tenía previsto realizar vigilancia y recorridos a pie para informar a clientes y titulares de establecimientos de las nuevas medidas que entran en vigor. Además, una vez cerrados, se pretendían organizar controles de tráfico estáticos e itinerantes con el objetivo de prevenir y prestar vigilancia en todos los accesos y salidas de la ciudad así como en los barrios.

En Elche, por su parte, de cara a este toque de queda se ha creado un nuevo turno de trabajo en la Policía Local. El nuevo turno trabaja de 19 horas de la tarde a 3 de la mañana y lo integran 24 agentes. Estos funcionarios se suman a los 6 que ya se añadieron de refuerzo en octubre.

Por su parte, desde la Subdelegación del Gobierno se indica que la Guardia Civil se encargará de vigilar el cierre perimetral por carretera, extremando la vigilancia en las zonas rurales. Por otro lado, la Policía Local de Alicante ha impuesto 152 denuncias por incumplir el estado de alarma en esta ciudad, el doble que el anterior fin de semana. Del total, 46 fueron por incumplir el toque de queda y 38 por no llevar mascarilla.