Las restricciones de movilidad a causa del covid-19 han provocado que muchos ciudadanos opten por llevar la fiesta a casa y raro es el fin de semana o víspera de día festivo que la Policía Local de Alicante no tiene que intervenir por estas celebraciones. La noche de Reyes tuvo que disolver cinco fiestas en viviendas de Alicante, donde los dueños de las casas se llevaron una propuesta de sanción como «regalo» de este día tan especial para los más pequeños.

Según informó ayer la Concejalía de Seguridad, durante la noche de Reyes se impusieron 21 denuncias por desobediencia del estado de alarma al incumplir las medidas de usar mascarillas y el toque de queda.

La cinco fiestas disueltas por la Policía Local en viviendas tras recibir quejas vecinales se estaban celebrando en inmuebles de la plaza Florida Portazgo y las calles Recadero de los Ríos, Pedro Ferrándiz y Francisco Escolano.

Por otro lado, en los controles preventivos de tráfico realizados por el Servicio Nocturno y la Unidad Fox se impusieron ocho actas de sanción por no llevar la mascarillas y once por incumplimiento del toque de queda.

Sobre la celebración de fiestas, e l concejal de Seguridad, José Ramón González, apela a «la responsabilidad en estos momentos tan críticos de la pandemia, la sensatez y conciencia de los ciudadanos» para que no las hagan.

La Policía Local de Alicante también sancionó a un local de hostelería que estaba utilizando cachimbas y en un control organizado en la avenida de Dénia fueron denunciados cinco conductores por circular en estado ebrio, según los datos facilitados por la Concejalía de Seguridad..