El conseller de Educación, Vicent Marzà, ha planteado tanto ante la consellera de Sanidad como ante el resto de responsables del Consell, que forman parte de la comisión interdepartamental creada para tomar decisiones frente a la pandemia, que los profesores sean considerados como personal prioritario en el plan previsto de vacunación contra el covid.

Pese a que inicialmente el conseller no respaldó abiertamente al profesorado cuando sus representantes reclamaron que se generalizaran entre el colectivo las pruebas covid antes de iniciar este curso, ahora quiere que se les considere como personal de riesgo para proceder a su inmunización cuanto antes con la vacuna.

Marzà y el resto de su equipo siempre declararon sobre la petición de pruebas generalizadas al profesorado que la decisión debía ser sanitaria.

Ahora ha decidido encabezar la petición de vacunas para el colectivo al que pertenece como maestro y la propia vicepresidente del Consell y compañera de partido del conseller en Compromís, Mónica Oltra, le ha respaldado y recalcado que la postura de Marzá es la correcta porque ha planteado el tema «donde se debía decir, en la comisión interdepartamental». Oltra critica indirectamente de esta forma el modo de proceder de Podemos, que en dicha comisión no respaldó el confinamiento que pedía Compromís y posteriormente lo solicitó de forma individual.

Pero Marzà no tiene contentos a los sindicatos docentes, que en concreto desde el STEPV y CSIF han denunciado ante el servicio de Seguridad y Salud de Trabajo la condiciones extremas en que se está impartiendo clase por las bajas temperaturas, y la obligación de mantener las ventanas abiertas para controlar el covid.

Para CSIF es «insostenible» y reclama que los técnicos comprueben la temperatura en las aulas, y el STEPV insiste en que no se reanuden las clases la semana próxima mientras dure la borrasca.