Montserrat Angulo, también enfermera en primera línea de batalla durante la pandemia, afirma que estamos teniendo casi los mismo datos que en abril, pero que la saturación en UCI de pacientes covid es más grave en esta tercera ola.

¿Cómo está la situación sanitaria actualmente en la provincia?

Los hospitales están hasta arriba, hasta el punto de habilitar zonas como el gimnasio para poder atender a más pacientes de coronavirus. La situación es preocupante teniendo en cuenta que el 35% de las camas en Unidad de Cuidados Intensivos en la Comunidad Valenciana están ocupadas, algo que no había pasado en toda la pandemia, con 381 pacientes covid. En las casas también hay mucha gente confinada y esto se traduce en que actualmente la Comunidad Valenciana es líder en contagios por covid. Estamos teniendo casi los mismos datos que en el mes de abril.

Con todo este contexto sanitario, ¿podríamos decir que estamos en la tercera ola?

Sí, con estos números todo indica a que estamos presenciando una tercera ola por covid que nada tiene que ver con lo anterior. En la Comunidad Valenciana la segunda ola tuvo lugar en forma de aplanamiento de la curva de contagios, teniendo un pequeño pico de positivos que no fue a más. Ahora es cuando estamos viendo un gran repunte de contagios de forma disparatada.

Esta semana se ha ordenado el cierre perimetral de Alcoy, Polop y Castalla pero viendo los datos, ¿qué municipio es el más afectado de la provincia?

Sin duda alguna las grandes ciudades como Elche o Alicante están teniendo unos datos preocupantes, algo que tiene que ver con la cantidad de pueblos con los que comparte hospital.

El 20 de enero debería estar vacunado todo el personal sanitario, ¿cree que se llegará al objetivo teniendo en cuenta la lentitud de las vacunaciones?

La vacunación tiene un proceso muy complejo, congelación y descongelación del número de dosis que se deben distribuir y administrar. A todo ello se le suma que el plan de vacunación comenzó el 27 de diciembre, coincidiendo con el parón de Navidad por los días festivos. El viernes comenzó la vacunación en los hospitales de la provincia, además cabe destacar que cada departamento gestiona con el número de vacunas y el personal que tiene su plan de vacunación. Esto hace que cada uno lleve su ritmo.

Se ha abierto una bolsa de trabajo de enfermeras desempleadas para administrar vacunas, ¿se ha conseguido disminuir la carga de trabajo?

Las enfermeras somos las encargadas de administrar la vacuna, además de llevar a cabo nuestro trabajo habitual. Afortunadamente la bolsa de enfermeras está vacía porque todas se encuentran trabajando para reforzar el déficit de profesionales que arrastrábamos. No solo se están encargando de administrar vacunas, sino que también se están reforzado otras plantas que necesitan enfermeras.

Semanalmente se reparten 10.000 dosis en la comunidad y solo se han administrado el 30%. Se necesitan 2.444 vacunas diarias para llegar el objetivo del 70% de la población vacunada en mayo, ¿cómo se van a organizar?

Pienso que se va a llegar al objetivo que hay de tener al 70% de la población española vacunada a mediados de año. Si bien, es cierto que en un principio la estrategia del Ministerio de Sanidad consistía en guardar un número de vacunas para asegurar una segunda dosis por si no llegaban más. Pero estamos viendo que podemos garantizar una vacunación de la población con la llegada de nuevas vacunas, como la de Moderna, algo que hará que se tome una velocidad de crucero con más persona sanitario a bordo.

El 11 de enero se comenzará a vacunar a los sanitarios de Atención Primaria, ¿cómo se llevará a cabo?

La vacunación del personal de los centros de salud es relativamente más fácil, partimos con que son centros más pequeños y con un grupo de trabajadores menor, por lo que creo que en un día, dos como mucho, todo el personal de un mismo centro puede estar inmunizado.

¿Dónde pensáis que habrá una mayor dificultad para administrar las vacunas?

Sin duda alguna el problema más serio está en las residencias y centros de mayores, ya que si hay algún positivo no se puede vacunar a nadie. En la provincia existe un gran volumen de residencias privadas y geriátricos, por lo que nos enfrentamos a un proceso de vacunación que será el más difícil y lento. Es por ello que las residencias con positivos por covid serán las últimas en ser vacunadas.

El papel de las enfermeras en el plan de vacunación es casi protagonista, ¿siente que os han tenido en cuenta?

Las enfermeras somos un pilar fundamental en el proceso de vacunación, pero también continuamos realizando nuestro trabajo. Estamos trabajando con más presión y más volumen y muchas están desbordadas anímicamente, pero continuamos haciendo todo lo que podemos, e incluso un poco más. Muchas veces los comportamientos de los ciudadanos no acompañan a sentirte mejor, pero somos conscientes de que hay más responsables que irresponsables.

Bares cerrados a las cinco, hospitales saturados y cada fin de semana se disuelven fiestas en viviendas. ¿Qué mensaje lanzaría a la población?

Debemos apelar a la responsabilidad individual, teniendo en cuenta que vivimos en sociedad. Si yo respeto las medidas de seguridad y las restricciones estoy contribuyendo a que una persona que necesite atención médica especializada la tenga. Lo hemos repetido mucho, pero es lo único que está en nuestras mano: mascarilla en lugares cerrados, distancia de seguridad, higiene y evitar aglomeraciones. Cumpliendo con esto todo cambia.