La Plataforma contra la Proliferación de las Apuestas de Alicante ha emitido un comunicado en el que califica de "completamente incomprensible" que los salones de juego no se vean afectados por la obligatoriedad de cerrar a las 17 horas y puedan permanecer abiertos hasta las 22 horas. "El gobierno valenciano está cometiendo un error de consecuencias gravísimas, por no haber valorado correctamente el funcionamiento interno de las casas de apuestas", señalan. 

"La grave situación sanitaria que estamos viviendo ha provocado una crisis social inaudita. Muchas personas desesperadas por haber perdido el empleo o estar sin ingresos pueden ver en las apuestas una salida desesperada a sus problemas, que sólo servirá para empeorarlos aún más. Sin embargo, la Conselleria de Sanidad, en lugar de protegernos contra las adicciones, ha decidido convertir a los empresarios de las apuestas en unos privilegiados, capaces permanecer abiertos cuando la gran mayoría de lugares de ocio han cerrado", añaden. 

Gracias al Consell -prosiguen- locales cerrados, "completamente aislados del exterior, donde sólo entrando se puede comprobar el cumplimiento de las normas higiénicas y sanitarias, estarán ocupados durante horas. Más aún cuando en muchos casos se incumple la Ley Antitabaco y se permite fumar en su interior". 

"Las casas de apuestas llevan años amenazando la salud psicológica de miles de personas vulnerables a la adicción al juego. Ahora también son una amenaza para nuestra salud física.  Por todo ello, exigimos coherencia a nuestros representantes. No se pueden garantizar nuestros derechos con la Ley de Juego al tiempo que se convierte a las casas de apuestas en una de las pocas opciones de ocio en nuestras ciudades. O se gobierna para el pueblo, o se gobierna para la patronal de las apuestas. Pedimos que se rectifique con la mayor celeridad esta decisión y se imponga a las casas de apuestas, como mínimo, las mismas condiciones que a los locales de hostelería".