Apenas una día después de que un juez de Alicante obligara a vacunar de inmediato al personal de la sanidad privada, la Conselleria de Sanidad se ha comprometido con los gerentes de estos centros a facilitarles la dosis de Moderna que precisen, de la remesa que está previsto que llegue la próxima semana, para que sean los propios sanitarios de estos centros los que las administren, como ya estaba acordado.

El anuncio se ha comunicado en una videoconferencia que se convocó el jueves horas después de se notificase el auto del juez, que se celebró ayer por la mañana y que transcurrió en un buen tono pese al varapalo judicial, al que no se hizo referencia alguna en el encuentro. Además de los representantes de los centros privados, por parte de la pública asistieron la secretaria autonómica, la subsecretaria, la directora general Asistencial y el responsable de programa de vacunación.

Fuentes presentes en la reunión precisaron que Sanidad ha asumido ese compromiso aunque ha admitido que no tienen la completa seguridad de que el envío de Moderna llegue el miércoles, cuando está previsto.

La primera remesa de este laboratorio llegó a la provincia el pasado 13 de enero. Fueron 800 dosis que precisan de una segunda tanda para lograr la inmunidad. Hay comprometidos otros tres envíos, de los que el primero sería el que se espera para mediados de la próxima semana. El resto llegarán con una cadencia de quince días hasta alcanzar un total de 48.800 dosis, de las que había que restar las 800 para completar el proceso de las ya administradas.

Los responsables de Sanidad ha informado a los gerentes de la privada que una vez de dispongan de las dosis se les entregarán en dos tandas: la primera para el personal que está en contacto más directo con el virus y la segunda para el resto.

En la Comunidad la plantilla del personal privado ronda las 7.000 personas de las que 2.500 trabajan en centros ubicados en Alicante. El compromiso de la Conselleria abarca a todo el colectivo aunque el auto del juez únicamente obliga a vacunar a los de Alicante ya que responde a las medidas cauteralísimas planteadas por el Colegio de Médicos de Alicante, a quien representa el letrado Guillermo Llago.

Frente al malestar del personal de la privada, que no entienden por qué no tienen la misma consideración que el de la pública, Sanidad ha incidido en el problema al que se enfrentan por la falta de vacunas después de que Pfizer se haya visto obligado a reducir esta semana las entregas por problemas en su laboratorio y las pocas dosis que han llegado hasta el momento de Moderna. La vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, declaró que «por muchas cautelerísimas que adopte un juzgado, si no hay vacunas, no se puede vacunar». Según la política de Compromís, con el recorte en la distribución existente en la actualidad, «sólo tenemos para administrar las segundas dosis, que ahora mismo es lo prioritario». El auto notificado ayer del magistrado José María Magán, titular del juzgado de lo Contencioso número tres de Alicante, ordenaba la vacunación de inmediato del personal de la privada «con el mismo orden, prelación y demás circunstancias que se aplicarían al personal sanitario público, sin discriminación ni demora alguna respecto al personal sanitario público». Para Carlos Rus, el presidente de la patronal de la sanidad privada Aspe, se ha llegado a la situación que ahora ha corregido la Justicia porque «se ha priorizado sin sentido ya que se tenía que haber vacunado antes a los que están en primera línea con independencia de que fueran de la pública o de la privada».

10.000 dosis el lunes

La provincia de Alicante recibirá el lunes las 10.000 dosis de la vacuna contra el coronavirus del laboratorio Pfizer, después de que la semana que termina este envío se hubiera visto reducido en un 42%, lo que ha obligado a interrumpir la vacunación a personal sanitario para poder asegurar la segunda dosis en las residencias.

Lo que sí llegarán son menos viales. Hasta hace poco, el laboratorio entregaba a los países cinco dosis de vacuna por vial. Sin embargo, los centros de vacunación lograban extraer seis dosis de los viales para vacunar a más personas. El laboratorio ha decidido ahora ajustar sus envío en relación a estas seis dosis que se obtienen finalmente, de manera que el número de viales que lleguen será menor aunque la provincia seguirá contando con 10.000 dosis de las 31.000 que se mandan a la Comunidad Valenciana, según ha confirmado la Conselleria de Sanidad. La Comunidad ha administrado hasta este jueves un total de 104.715 dosis de la vacuna contra el coronavirus. Del total, 102.123 son de Pfizer y 2.592 de Moderna. .

Los dentistas tendrán prioridad en la vacunación

El colectivo está incluido en la primera etapa de la campaña, que concluye en el mes de marzo

Los odontólogos, higienistas dentales y otro personal sanitario que atiende sin mascarilla durante más de 15 minutos serán los siguientes en ser vacunados frente al coronavirus.

Así se establece en la actualización 2 de la Estrategia de vacunación aprobada por la Comisión de Salud Pública, y que recuerda que en la primera etapa de la vacunación, que aún no ha concluido, están los residentes y personal sanitario y sociosanitario que trabaja en residencias de mayores y de atención a grandes dependientes así como el personal de primera línea en el ámbito sanitario y sociosanitario.

También está incluido otro personal sanitario y sociosanitario así como personas consideradas grandes dependientes que no estén institucionalizadas. En la provincia de Alicante ejercen su actividad en torno a 1.150 odontólogos.

Una vez finalice la vacunación de estos primeros grupos prioritarios -ancianos y trabajadores de geriátricos, sanitarios y dependientes en sus domicilios- el próximo grupo a vacunar en la siguiente etapa es el de las personas mayores de 80 años, que comenzará «a vacunarse en el menor plazo de tiempo posible y en función de la disponibilidad de dosis de vacunas». Previsiblemente, este grupo tiene que empezar a ser vacunado en el mes de marzo.