La Generalitat ha puesto a disposición de la provincia de Alicante 161,3 millones para hacer frente a la crisis económica derivada del covid. Es la respuesta que el Gobierno valenciano ha dado a las 9.500 empresas y casi 74.000 trabajadores (entre autónomos y trabajadores de régimen común) pertenecientes a los sectores de la hostelería, el ocio, el turismo y la restauración. Para toda la Comunidad son más de 380 millones de euros a través del Plan Resiste, dirigido a minimizar los daños en las actividades más vulnerables a las restricciones sanitarias. Justo la semana en la que los bares han bajado sus persianas, Ximo Puig ha respondido con un plan de choque que cuenta con la implicación de todas las administraciones y que pretende atender las necesidades específicas de los distintos tipos de empresas afectadas, puesto que incluye hasta siete líneas de distintas modalidades con las que atender tanto los problemas urgentes de liquidez de las cadenas hoteleras, como las ayudas directas para compensar el pago de las cuotas de la Seguridad Social o de autónomos que puedan sufrir los pequeños negocios de restauración.

La hostelería representa casi la mitad de los trabajadores que continúan en ERTE y de los autónomos con prestación por cese de actividad en toda la Comunidad Valenciana. Desde el inicio de la pandemia, los sectores mencionados concentran el 30% de la pérdida del valor añadido y el 59% de la destrucción del empleo de la Comunidad Valenciana. En este periodo de paralización de su actividad normal, la Generalitat ha articulado un fondo que tiene un especial protagonismo en la provincia de Alicante, cuyo PIB está impulsado especialmente por la actividad vinculada a los sectores más afectados. Ximo Puig ha asegurado que no se puede aplazar la recuperación a después porque «sería demasiado tarde para muchos empresarios y autónomos y también para sus plantillas de trabajadores».

La Generalitat ha decidido hacer frente a la difícil situación económica que se vive en la provincia, teniendo en cuenta que el número de autónomos relacionados con estos sectores en los municipios alicantinos asciende a casi 18.000, un 80% de los mismos concentrados en el sector de la restauración (bares, cafeterías, pubs, restaurantes…). Además, la provincia tiene en torno a 9.500 empresas afectadas relacionadas con esta actividad, que concentran casi 56.000 trabajadores más. Hay que remarcar también que Alicante tiene 23.700 trabajadores en ERTE y 12.800 autónomos que se han visto afectados por la pandemia (bien por cese de actividad o por caída brusca de los ingresos), una gran parte de ellos focalizados en el sector de la hostelería, turismo y ocio.

Ximo Puig ha avanzado estas ayudas la semana en la que han entrado en vigor las últimas restricciones contra la pandemia: el cierre total de la hostelería y el de los comercios a las 18 horas durante 14 días. El compromiso del Consell ahora es poner estos recursos a disposición de las empresas en el menor plazo de tiempo posible. De hecho, en los últimos diez días, los distintos departamentos de la Generalitat han mantenido diversas reuniones con la patronal y los sindicatos para agilizar las ayudas, que, precisamente, es lo que reivindican las organizaciones empresariales.

El plan de choque Resiste se ha articulado tras la celebración de una mesa institucional con las diputaciones, los grandes ayuntamientos y la Federación de Municipios para acordar el Fondo Covid de Cooperación Municipal. El resultado es que en apenas una semana el Consell ha anunciado que repartirá entre las empresas y sectores afectados una línea de ayudas dotada con 50 millones del IVF y, por otro lado, las Ayudas Paréntesis, de ayudas directas a estas empresas y dotada con 160 millones de euros a través de un decreto-ley aprobado por el pleno del Consell este mismo viernes. «Somos conscientes de la agilidad que las empresas requerían a la Administración y hemos dedicado todo nuestro esfuerzo a que, desde el mismo momento en que se han visto afectados por las restricciones más severas, los autónomos y empresas afectadas puedan tener ya a su disposición algunas de las líneas de ayuda, y en los próximos días se aprobarán las restantes, permitiendo que su liquidez no se vea más dañada», dijo Ximo Puig.

El conjunto del plan se articula en cuatro bloques: ayudas directas a empresas, autónomos y trabajadores afectados por ERTE, además de la cobertura de las cuotas de la Seguridad Social (105 millones para toda la Comunidad); ayudas específicas para sectores con un perjuicio sostenido durante toda la pandemia (15 millones); nuevos instrumentos financieros del Banco de la Generalitat (100 millones); y el Fondo de Cooperación covid acordado con diputaciones y ayuntamientos (160 millones).

Ante este anuncio, tanto el presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, como el alcalde de Alicante, Luis Barcala, han pedido al Consell agilidad a la hora de tramitar estos fondos, exigiendo a su vez al Gobierno central una reducción de la presión fiscal al sector hostelero mientras dure la pandemia.

Consenso con Diputación y ayuntamientos para repartir 65,3 millones de euros

Dentro del paquete de ayudas del Plan Resiste, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, anunció el jueves que cada autónomo y microempresa de los sectores más afectados por la crisis recibirá 2.000 euros fijos para evitar el cierre de los negocios viables, hasta un máximo de 10.000 euros. Esta línea denominada Ayudas Paréntesis asciende a 160 millones de euros (65,3 para la provincia) con fondos autonómicos (100 millones), provinciales (36 millones) y los municipales (24 millones). El número aproximado de beneficiarios asciende a 45.000 autónomos y 23.000 empresas, con unos 136.000 trabajadores vinculados de toda la Comunidad.

La cantidad prevista se ha incrementado de los 120 millones anunciados recientemente a 160 millones, gracias a la aportación de 40 millones de la Generalitat, según concretó la mesa institucional compuesta por las tres partes y en la que también participaron el presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón; el alcalde de Alicante, Luis Barcala; y el alcalde de Elche, Carlos González. Según las previsiones, a las empresas y autónomos de los municipios de la provincia de Alicante les corresponderán 65,36 millones; a los de Castellón, 18,63; y a los de Valencia, 76. Estos fondos están dirigidos a los sectores de la hostelería y restauración, alojamientos y actividades turísticas, eventos y actividades culturales y recreativas.

Además, la Generalitat hará un esfuerzo adicional en dos ámbitos que han sufrido de forma prolongada las restricciones de actividad derivadas de la pandemia con ayudas directas a las actividades del ocio y entretenimiento, con especial atención al ocio nocturno y con otra línea destinada a los profesionales de la artesanía y a los sectores vinculados a las fiestas tradicionales. Otra de las medidas es la ayuda directa vinculadas a ERTE, autónomos más afectados por la pandemia y la cobertura de las cuotas de la Seguridad Social. Además, el brazo financiero de la Generalitat, el IVF, ha puesto en marcha dos nuevos instrumentos de financiación empresarial.