Las proyecciones matemáticas aportan un halo de luz en un escenario más que sombrío dado el momento crítico que atraviesa la provincia de Alicante, y el conjunto de la Comunidad Valenciana, por los efectos de la tercera ola de la pandemia de covid. La última actualización de las proyecciones que elabora Santiago García Cremades, profesor de la Universidad Miguel Hernández de Elche (UMH), apuntan a un crecimiento más contenido tras dispararse las cifras como consecuencia de los excesos durante las fiestas navideñas, que supondría que la curva de contagios estaría acercándose a su pico máximo. Aunque aún quedan días. Algo más optimistas, si cabe, son las proyecciones en el global de la Comunidad, donde la esta semana se podría empezar a doblegar la curva de positivos.

Los datos son reveladores, como durante toda la pandemia. En la provincia, entre el 6 y el 13 de enero, la tasa de incidencia (nuevos casos en los últimos catorce días por cada 100.000 habitantes) aumentó un 47%, pasando de 360 a 532. Esas cifras se han disparado estos últimos días, yendo del 532 al 957, lo que supone un incremento del 80% hasta el 20 de enero. La última proyección matemática del profesor García Cremades estima que la incidencia acumulada, uno de esos valores que tienen en cuenta las autoridades a la hora de decretar nuevas restricciones, se quedará en un intervalo entre el 1.157 y el 1.352 en la segunda mitad de esta semana, lo que supone un crecimiento, en el mismo periodo de tiempo, que rondaría entre el 5 y el 23%. Unas cifras que pese a que seguirían siendo preocupantes, ya que el objetivo es que la curva empiece cuanto antes a bajar, pueden aportar algo de esperanza en el peor momento de la pandemia.

El conjunto de la Comunidad apunta a un escenario mejor que en la provincia de Alicante. Mientras que los modelos advierten de un crecimiento seguro de la tasa de contagios en el territorio más al sur, en el global de la autonomía puede darse el caso de alcanzar el pico máximo de contagios esta semana. Así lo refleja la proyección del profesor García Cremades, que apunta a que la incidencia acumulada se quedaría entre el 994 y el 1.291 a mediados de la semana. En concreto, el 27 de enero, fecha límite del último estudio realizado por el matemático.

La curva de contagios de la tercera ola modera su crecimiento y se acerca a su pico máximo.

Que la curva de la incidencia acumulada llegue cuanto antes a su máximo supone el principio del fin de la tercera ola. Una situación que las autoridades sanitarias esperan que se produzca durante los próximo días, tras un incremento disparado desde las fiestas de Navidad. Y es que la tasa de contagios se ha triplicado en apenas un mes, el tiempo que ha transcurrido desde la previa de Nochebuena y este tramo final del mes de enero. La provincia, el pasado 23 de diciembre, tenía una incidencia acumulada de 406 casos, frente a la barrera del millar que ya ha roto. La situación en la Comunidad ha sido similar. Este escenario de transmisión comunitaria ha obligado a la Generalitat Valenciana, y también a muchos de los ayuntamientos de la provincia, a incrementar las medidas restrictivas para intentar hacer frente a una descontrolada tercera ola, de la que ya avisaron los sanitarios antes de las fiestas más familiares. Sin embargo, frente a las advertencias de los expertos, se decidió por «salvar» la Navidad. Luego llegaron las nuevas limitaciones, con un momento determinante: cuando el Consell decidió cerrar toda la hostelería y, además, limitar el horario del comercio hasta las 18 horas. Medidas drásticas para intentar controlar la tercera ola que estarán en marcha, al menos, hasta el próximo 4 de febrero. Luego, este pasado viernes, se confirmó que la Generalitat también prohibirá las reuniones de no convivientes, con algunas excepciones para el cuidado de personas y los que viven solos. Sobre la mesa persiste el adelante del toque de queda, que debe contar con el visto bueno del Gobierno central. Medidas para contener el avance de la tercera ola. En la provincia, según las proyecciones matemáticas, la curva se aproxima a su máximo, pero aún quedan días.