UTE Alicante -la adjudicataria del servicio de limpieza viaria y recogida de residuos que forman FCC, Ferrovial y Cívica- defiende su gestión al frente del contrato que presta desde hace casi ocho años en la capital alicantina, rechazando que la ciudad se encuentre entre las más sucias de España (como señalaba una encuesta a nivel nacional, que la situó en el segundo puesto, sólo por detrás de Jaén), asegurando que la contrata se ejecuta según marca el pliego de condiciones impulsado por el Ayuntamiento y admitiendo, eso sí, que el servicio siempre es mejorable, pero que para conseguirlo sería necesario un incremento del personal y de los medios que no prevé un contrato que finaliza en poco más de medio año, a finales de agosto.

La defensa de su gestión al frente del servicio municipal se extrae de las respuestas que UTE Alicante ha remitido al Ayuntamiento, en contestación al cuestionario remitido el pasado mes de diciembre desde la comisión municipal creada para analizar el contrato de limpieza viaria y recogida de basura. Desde el Pleno local, ante la negativa del gerente de la adjudicataria acudir a responder en persona -alegó que la UTE da cuentas ante el director facultativo-, acordaron remitir las preguntas por escrito. Llegaron a medio centenar, aproximadamente. Un mes después, la adjudicataria ha enviado sus respuestas, que se analizarán en la próxima sesión del órgano municipal, previsto para dentro de ocho días.

Entre las cuestiones planteadas, se incluía la petición de una valoración sobre que el servicio de limpieza sea el «peor valorado por la ciudadanía alicantina». En su respuesta, la UTE rechaza una opinión generalizada entre la población: «No se adecua a la realidad ni a la imagen que Alicante proyecta». Además resaltan que la adjudicataria «ejecuta el contrato según el pliego de condiciones que rige la contrata con los medios y recursos disponibles». Eso sí, recuerdan que «ha ido planteando modificaciones en la metodología de trabajo que durante los últimos años han mejorado significativamente el servicio prestado», según el criterio de las empresas, que también reclaman la participación de todos para seguir avanzando en la prestación del servicio: «La mejora de la percepción de la ciudadanía y de la ciudad de Alicante es necesaria la implicación de todos: de la concesionaria, de los ciudadanos, de los técnicos, grupos políticos y de los organismos implicados de una manera directa e indirecta en la limpieza e imagen de la ciudad».

Al respecto, ante una pregunta sobre las carencias y los retos de un pliego que caduca a finales de verano y que el bipartito aseguró que no prorrogaría, la adjudicataria reconoció que el servicio puede ser mejor, recordando que las ciudades se expanden y que, por tanto, los medios se pueden quedar insuficientes. «Todo proyecto de recogida y limpieza es susceptible de mejora, teniendo en cuenta el crecimiento de las ciudades y, por ello, de los mayores espacios a limpiar y recoger, singularidad del entorno, modificación del mismo por nuevos espacios ajardinados... Ello conlleva la necesidad de incrementar recursos humanos y materiales, frecuencias y zonas de actuación, cambios en los sistemas de barrido, baldeo...», señalan desde UTE Alicante.

Sobre los cambios que ha ido sufriendo el contrato, la concesionaria recuerda que, desde el pasado 1 de septiembre, una decena de vehículos se dedican en exclusiva a la limpieza del entorno de los contenedores, destacando que el abandono de enseres en las ciudades «no es un problema única en Alicante». La adjudicataria, sobre otro servicio de mejora del servicio como es el correo electrónico o el WhatsApp para alertar sobre quejas, asegura que el 85% de las incidencias se resuelven en menos de 24 horas, mientras que el resto se dilatan por «requerir autorización o mayor planificación».

Del subparque al «puerta a puerta» y la auditoría

La concesionaria responde a las cuestiones de la izquierda y Vox, ya que el gobierno no hizo ninguna

Muchos son los asuntos que se abordan en el cuestionario devuelto por UTE Alicante, entre los que destacan el subparque en Playa de San Juan, el servicio «puerta a puerta», la auditoría económica -que ha acabado en los tribunales- y la gestión del vertedero y sus años de vida. La adjudicataria sostiene que ha llevado a cabo «todos y cada uno de los trámites» para la construcción del subparque en San Juan, que permitiría optimizar el servicio al reducir los tiempos de respuesta. «Estamos a la espera de la concesión de la licencia», añaden desde la empresa.

Por otro lado, la UTE dice desconocer el proyecto del «puerta a puerta» al no haber recibido información sobre el proyecto piloto desde la concejalía. Con todo, añaden que están a «disposición» de ponerlo en marcha, como han realizado en ciudades como Madrid, Barcelona, Valencia o Zaragoza, entre otras. Además, aseguran haber cumplido la memoria de gestión de residuos, la renovación de la maquinaria y la dotación a la plantilla de equipos de protección frente al coronavirus, además de haber cumplido órdenes respecto al quinto contenedor (residuos orgánicos). Por otra parte, la adjudicataria sostiene que no se niega a una auditoría económica, aunque reconoce que existen «legítimas discrepancias». El conflicto ha acabado en los tribunales, con un juzgado dando la razón al Ayuntamiento y obligando a la UTE a asumir la auditora elegida por el bipartito. De todo esto se hablará en la próxima sesión de la comisión.

La próxima sesión será doce días más tarde de lo previsto

La próxima sesión de la comisión creada para analizar el contrato de la limpieza viaria y recogida de residuos se prevé celebrar doce días más tarde de los previsto. La reunión se acordó para el pasado viernes, 22 de enero. Sin embargo, el concejal de Limpieza, Manuel Villar, convocará la sesión para el miércoles 3 de febrero, alegando que la agenda municipal no permite cumplir con el calendario acordado por todos los grupos municipales. Así, la sesión, en la que se abordarán las respuestas de la UTE, se celebrará tras el pleno ordinario de este mes, que se celebrará este jueves.