El bipartito de Alicante llevará el Presupuesto de 2021 ante el Consejo Social de la Ciudad. Eso sí, lo hará tras conseguir la aprobación inicial en Pleno, que tiene asegurado tras el acuerdo entre Ciudadanos y el PSOE y la anunciada abstención de Vox. Así lo ha desvelado el portavoz del bipartito, Antonio Manresa, esta mañana, en la rueda de prensa telemática tras la Junta de Gobierno. "El equipo de gobierno ha decidido convocar el Consejo Social una vez se aprueben los Presupuestos inicialmente en el Pleno", ha explicado Manresa. Todavía no hay día y hora para esa sesión extraordinaria. La próxima fecha clave será el lunes 1 de febrero, cuando finaliza el plazo para la presentación de enmiendas. Luego, esas propuestas se abordarán en una Comisión de Hacienda previa a un Pleno que no se espera para antes de la segunda semana de febrero.

La decisión del bipartito de convocar el Consejo Social de la Ciudad después de que el Presupuesto pase por el Pleno ha generado malestar entre la izquierda municipal. El socialista Francesc Sanguino ha cargado contra Barcala por el orden elegido: "El desprecio a las normas de cogobernanza con los estamentos municipales de participación ciudadana de Barcala ya es un clásico. El año pasado no presentó a las juntas de distrito el proyecto de presupuesto tal cual está establecido; ha constituido el Consejo Económico y Social con un año y medio de retraso con un defecto de forma que arregló diez minutos antes de su presentación a pleno saltándose a la Junta de Portavoces y para evitar que fuera impugnado, por indicación de nuestro grupo; tampoco ha presentado el proyecto de presupuestos de 2021 a las Juntas de Distrito". El socialista lamenta la actitud del equipo de gobierno: "Ahora tiene pensado convocar el Consejo Económico y Social de la tras el pleno de presupuestos. De aprobarse, saldrá a exposición pública y los vecinos no cuentan con ningún servicios de asesoramiento municipal para tramitar las alegaciones, por lo que estamos de nuevo en riesgo de que se las tumben por defecto de forma, como el año pasado. Barcala practica una alcaldía sin contar con la ciudadanía, apoltronado, solo y de una pobreza democrática anacrónica".

Desde Unidas Podemos, el portavoz, Xavier López, también ha reprochado las formas al bipartito: "Es una falta de respeto a la ciudad apartar a los vecinos de la redacción presupuestaria y una muestra más de la falta de transparencia del equipo de gobierno el negarse a explicar a la ciudadanía a través de sus órganos de representación las cuentas. Parece que Barcala se avergüenza de este proyecto de presupuestos y que sería incapaz de sostener ante las entidades sociales por qué el retraso en su tramitación, por qué el recorte en áreas sociales y la descontextualización de sus políticas que no priorizan la emergencia que viven las personas más vulnerables, por qué la ridícula ejecución de los proyectos año tras año y por qué fía el principal acuerdo a la ultraderecha".

Por último, el portavoz municipal de Compromís, Natxo Bellido, también ha participado en el frente común contra la decisión del bipartito: "Consideramos una burla al Consejo Social de la Ciudad que se pretenda convocar después del Pleno de aprobación inicial de Presupuestos y que no haya voluntad de convocar a las Juntas de Distrito para explicarlos. El bipartito de Barcala se ha convertido en un gobierno insumiso ante la Sindicatura de Greuges que se mofa de una forma intolerable de los órganos de participación ciudadana de Alacant. Han perdido el norte y el mínimo respeto institucional. Vemos una vez más la dregradación de la calidad democrática del Ayuntamiento cuando (des)gobierna la derecha".

Desde Vox, por su parte, han preferido no valorar la decisión del bipartito.

El último Consejo Social en Alicante se celebró a principios de 2019, antes de las elecciones municipales y ya con Luis Barcala como alcalde.