Los seis concejales de Limpieza que han estado al frente del área desde 2013, del PP, PSOE y Guanyar (marca blanca de EU), estarán invitados a comparecer en la comisión municipal que estudia el contrato adjudicado a UTE Alicante, formada por FCC, Ferrovial y Cívica. Así se ha acordado en la sesión celebrada esta mañana.

La iniciativa ha surgido inicialmente desde la izquierda, que ha solicitado la intervención del actual concejal de Limpieza, el popular Manuel Villar, quien ha aceptado la propuesta, pero ha solicitado ampliarla a todos los concejales del área desde el principio del actual contrato, en 2013. La propuesta del popular ha sumado finalmente el apoyo de su socio de gobierno, Ciudadanos y de Vox, frente al voto en contra de Compromís ("Creemos que ese festival de comparecencias no nos lleva a ningún sitio") y la abstención del PSOE y de Unidas Podemos.

Así, el próximo 5 de marzo, y en orden de antigüedad en el gobierno municipal, el popular Andrés Llorens, los exmiembros del tripartito Víctor Domínguez y Miguel Ángel Pavón (Guanyar) y el socialista Fernando Marcos, junto a los populares Israel Cortés y Manuel Villar estarán invitados a comparecer ante la comisión. Por ahora, la única intervención segura será la del actual edil, Manuel Villar.

Este punto ha sido el que ha originado un mayor choque entre los miembros de la comisión municipal, con acusaciones cruzadas de intentar sacar rédito político de una comisión creada para estudiar el contrato que presta UTE Alicante desde 2013 y que finaliza tras el próximo verano.

Más asuntos

Durante la sesión también se ha hablado del futuro. De hecho, el concejal Villar ha reconocido que se está estudiando ampliar el actual contrato para incluir la recogida de ropa usada (que ahora lo presta Proyecto Lázaro a través de un convenio con Acción Social que finaliza en mayo) y la recogida de la materia orgánica (el conocido como "quinto contenedor"). El edil de Limpieza ha admitido que en su área están estudiando incluir estos dos servicios en el actual contrato, aunque ha entrado en contradicción durante su intervención, ya que al principio ha admitido que las críticas por pagar más a la actual adjudicataria, participada entre otros por el promotor Enrique Ortiz, les podía echar atrás ("estamos estudiando hacer nuevos modificados, valorando si queremos que nos saquen los colores por aumentar el servicio"), para luego asegurar ante las observaciones de la izquierda que se había explicado mal ("si se ha entendido eso, me he explicado mal, ya que eso no nos va a frenar".

Por otro lado, durante la sesión se ha valorado la petición de los socialistas, a las que después se han sumado el resto de grupos de la izquierda, para que entidades vecinales compareciesen también ante la comisión para dar su visión sobre la prestación del contrato de limpieza y recogida de residuos. Sin embargo, el secretario de la comisión ha explicado que la petición no podía tener recorrido al chocar con lo recogido en la moción aprobada en el pleno. A ese resquicio también se han sumado los socios del gobierno y Vox.

Respuestas de la UTE

En la primera sesión del año de la comisión de limpieza, también se han abordado -aunque casi de pasada- las respuestas enviadas por la UTE al medio centenar de cuestiones planteadas desde la oposición. El gerente de la adjudicataria rechazó en un principio intervenir en la comisión, pero finalmente accedió a contestar por escrito. Desde los tres grupos de izquierda han sido críticos con las respuestas, asegurando que "no sirven para nada", como ha subrayado Vanessa Romero (Unidas Podemos), ante la escasa concreción de la adjudicataria.