«Estoy desempleada desde marzo, solo siento depresión y desesperación al no encontrar trabajo ahora mismo». Este es el caso de Mireia, una joven de 30 años que ha visto cómo la pandemia que nos ha dejado el covid le ha quitado el trabajo y la ha llevado a la absoluta vulnerabilidad. El peaje que muchos han tenido que pagar para sobrevivir a esta pandemia tiene que ver con la pérdida de trabajo y de identidad personal. «Lo peor de la pandemia es el precio psicológico que estamos pagando simplemente por vivirla», apunta Loreto Esclapez, psicóloga.

¿Cómo nos ha cambiado la vida con el covid? Tras esta pregunta existes tres situaciones en las que ponemos el foco: laboral, emocional y social. Una encuesta realizada entre ciudadanos residentes en la provincia de Alicante aborda estas tres cuestiones y revela datos que dibujan la sombra que nos ha dejado este virus mundial.

La situación laboral de los encuestados es lo que más se ha visto perjudicada tras este duro año, y es que el 60% de los participantes afirman que la pandemia ha empeorado su situación laboral. De este porcentaje, el 40% señala que el coronavirus ha destruido su puesto de trabajo. Uno de los afectados lleva dedicándose a la hostelería más de treinta años y afirma que tras este duro parón ve difícil volver a trabajar de lo mismo. «La crisis nos ha traído pobreza y deudas a los hosteleros, pagamos los mismos impuestos, pero trabajamos la mitad o, en estos momentos, nada», explica el trabajador.

Lo llamativo con respecto a la situación laboral de los participantes es que solamente dos personas del centenar de encuestados afirman que su situación ha mejorado con el covid. Una de ellas es enfermera, quien ha podido pasar a tener un contrato después de estar más de tres años cubriendo bajas. El otro beneficiado afirma que gracias al covid ha conseguido trabajo como periodista en una televisión pública, con un sueldo mejor que el que tenía anteriormente. Mientras, el 98% restante están viviendo cómo su economía está paralizada, cómo los pagos y las deudas llegan religiosamente a final de mes y cómo su presente, y su futuro, cada vez pesa más.

¿A favor o contra las medidas?

«Entiendo perfectamente las medidas, pero me están haciendo ser otra persona», señala uno de los encuestados, afirmación que comparte con la mitad de las personas que participaron en la encuesta. Además, los sentimientos característicos de esta dura pandemia vienen de la mano de la apatía, la incertidumbre y la tristeza. Por otro lado, la otra mitad de los encuestados afirman que no están de acuerdo con las normas anticovid presentes en estos momentos en la Comunidad Valenciana y afirman que están poniendo en jaque su paciencia y su salud mental. El 75% de los participantes en la encuesta coinciden en la necesidad de que haya más transparencia en la toma de decisiones por parte de los políticos y que sean medidas avisadas con antelación y que no estén cambiándolas cada semana.

Sergio, un joven de 25 años, opina que «las medidas no han sido más que un constante prueba y error sin estudio ni análisis previo, que han desembocado en las actuales medidas prácticamente de confinamiento domiciliario». A esta opinión se le suma Francisca, profesora del departamento de Medicina de la Universidad Miguel Hernández de Elche, quien añade que «nos acercan a un tipo de sociedad fría y desconectada del contacto físico con los demás».

Loreto Esclapez, psicóloga, explica que para hacer frente a la situación personal que nos está dejando la pandemia, donde las medidas impuestas por las autoridades marcan nuestro día a día debemos, en primer lugar, cambiar la forma de ver las restricciones, principal motivo de preocupación para muchos. «No hay que interpretar las restricciones como represión, sino como algo que hago por el bien común y la salud; pensar de esta manera nos hace seguir sintiéndonos libre, decido cómo me afectan los hechos y mi actitud para afrontarlos», señala la profesional.

Salud mental en pandemia

El peaje para sobrevivir a esta pandemia mundial ha sido nuestra salud mental. La necesidad de enseñar herramientas sobre inteligencia emocional desde pequeños se ha dejado ver a la hora de enfrentarnos a situaciones desagradables o desmotivadoras. «Lo que realmente preocupa a los expertos en salud mental en estos momentos es que no tengamos la capacidad ni las herramientas para sobreponernos a los momentos difíciles», señala la psicóloga.

Por otro lado, hemos visto cómo desde el principio nos han dicho que tras este duro golpe «saldremos siendo mejores personas». El 80% de los encuestados están en contra de esta afirmación. En estos momentos, el 20% de los encuestados señalan que les resulta imposible sentir felicidad cuando las preocupaciones les está imposibilitando el tener una vida normal, llegando incluso a provocarles insomnio. Otro 20% indican que les cuesta mucho estar felices, mientras que el 60& restante dicen que lo son a veces. Ante este paradigma, Loreto Esclapez pone luz ante la cris personal por la que la mayoría está pasando. «Hay una idea de moda de que la pandemia nos ha hecho a todos mejores personas o que nos ha ayudado crecer personalmente. Esto no es así para todo el mundo. Hay personas que han llevado a cabo un proceso de mayor introspección. Y hay personas que no. No hay reglas sobre esto», señala.

La experta en salud mental, explica que ante la importancia de crecer personalmente no debemos esperar a vivir un evento negativo para crecer personalmente y añade que debemos ser conscientes de que el autoconocimiento, el desarrollo personal y la inteligencia emocional es algo que todos tendríamos que tener presente siempre.

Por último, la pregunta que concluye la encuesta llevada a cabo es si, tras esta pandemia, los participantes sienten que valoran más a la familia y amigos cercanos, siendo el vínculo familiar el principal apoyo en estos momentos donde el foco social solo está permitido entre convivientes.

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El 75% de los encuestados afirman que valoran más a la familia antes que ahora, mientras que el restante aclaran que siempre la han valorado por igual. Lo revelador es que referente a la amistad las prioridades han cambiado durante este año pandémico. ¿Qué tipo de amistades tienes? El covid las ha destapado. El 30% de los encuestados añaden que las medidas anticovid, como el no poder ir a bares o acudir a otras comunidades, ha hecho cambiar su círculo social debido a que al no verse con asiduidad han perdido el contacto.

Tal y como afirma la psicóloga, Loreto Esclapez, la salud mental debe trabajarse desde la prevención; desde las escuelas y desde los servicios públicos de salud con un mayor número de psicólogos clínicos. Muchas personas no están gestionando adecuadamente las emociones que le han aflorado durante la pandemia, y, según la experta, una inadecuada gestión emocional durante mucho tiempo puede acabar derivando en problemas psicológicos mayores.