Los alcaldes de la provincia se están rigiendo por criterios distintos a la hora de distribuir las Ayudas Paréntesis, dentro del Plan Resistir, que ha impulsado la Generalitat para inyectar liquidez a los sectores más afectados por la pandemia. Hay autónomos y microempresas que ya han cobrado, o esta misma semana lo harán, 2.000 euros y 200 euros más por cada trabajador a su cargo, porque sus alcaldes han decidido agilizar el proceso para resolver las solicitudes en cuanto llegan. Es el caso de Elche, Alcoy o Elda, todas gobernadas por el PSPV. Sin embargo, la mayoría de las grandes ciudades han aplicado una fórmula de trabajo diferente que sus dirigentes consideran más garantista y que consiste en abrir un periodo de recepción de solicitudes para la totalidad de los interesados y tramitar el conjunto de instancias a través de un pago único. Este procedimiento, según admiten, es más seguro y evita que nadie se quede fuera. Así lo está haciendo Alicante, Orihuela, Torrevieja, Benidorm (todos del PP) y también Dénia, gobernada por el PSPV.

La Generalitat puso en marcha las Ayudas Paréntesis para apoyar a los sectores más castigados por la crisis económica. A principios de febrero, abonó las transferencias de la parte que le corresponde a través de una fórmula bancaria -el confirming- a interés cero. A la provincia le corresponde un total de 65,3 millones, de los que la Generalitat ha aportado 40,8 millones, la Diputación de Alicante tiene que inyectar 14,7 y los ayuntamientos, 9,8 millones. Aunque hubo consenso para sacarlas adelante, a la hora de distribuir los recursos, cada municipio está aplicando sus propios criterios. En la mayoría de los casos -a excepción de Dénia- las siglas políticas son las que están marcando los tiempos de pago. Los del PP dicen que, si la Generalitat lo hubiese dejado claro en su decreto no se hubieran dado diferentes interpretaciones tanto políticas como técnicas, mientras el Consell defiende la autonomía municipal para que cada alcalde pueda decidir, aunque aseguran que la mejor fórmula es resolver cada solicitud conforme va llegando para dar agilidad y que los autónomos puedan cobrar cuanto antes. «Los alcaldes no deberían esperar a pagar porque la gente está desesperada por cobrar, pero hay que dejar claro que la autonomía municipal es sagrada», dijo el director general de Administración Local, Toni Such. En la misma línea se pronunciaron los alcaldes de Elche, Alcoy y Elda. Los socialistas coinciden en que la clave de estas ayudas es la rapidez y recuerdan que la Conselleria ya ha revisado el número de beneficiarios para que nadie se quede fuera, por lo que han decidido pagar conforme van recibiendo solicitudes y comprobando que cumplen los requisitos. En este caso, quien antes presenta la documentación antes cobra. El caso de Elche es significativo porque se han recibido menos de la mitad de solicitudes previstas tanto por las dificultades con la administración electrónica como por la obligación que existía de estar al día con la Seguridad Social y la Agencia Tributaria, por lo que el Ayuntamiento ha decidido eximir a los solicitantes de estar al corriente de las obligaciones fiscales y con la Seguridad Social.

Frente a esta posición, los alcaldes de Alicante, Orihuela, Torrevieja, Benidorm y Dénia aseguran que su prioridad es no dejar a nadie sin cobrar por no tener dinero. «Esperar a recibir todas las solicitudes es un proceso más garantista porque no te arriesgas», indican. Hacerlo en una sola convocatoria tiene la ventaja, según defienden, de dar seguridad jurídica al proceso y aplicar el mismo criterio para todas las pymes. «No se puede trabajar sin saber a cuántas empresas vamos a ayudar», alegan. Además, los dirigentes del PP apostillan que el retraso de las ayudas de la Diputación de Alicante no les ha afectado en nada y confían en que estos recursos llegarán antes de que ellos empiecen a pagar. La aportación de la institución provincial al fondo común se ejecutará a finales del mes de marzo, según las previsiones del equipo de gobierno. Desde el Consell entienden que el caso de Dénia es una excepción y que esta estrategia responde a la voluntad de los populares por «ocultar» que Carlos Mazón sigue sin pagar. Cabe recordar que el sistema de pago con recepción de todas las solicitudes es el mismo que se aplica habitualmente en todas las ayudas.