La consellera de Agricultura Mireia Mollà, reclama a los ministros valencianos que forman parte del Gobierno de Pedro Sánchez que «hagan fuerza» y apoyen la llegada de agua a la provincia de Alicante. Mollà, en una entrevista ayer a la Cadena Ser, aseguró que es el momento de que reconsideren posturas en torno al recorte de los caudales del trasvase Tajo-Segura, que pueden suponer 80 hectómetros cúbicos menos de agua en las aportaciones anuales a la provincia de Alicante y a Murcia. Una merma que podría acarrear otros 70 hectómetros de menos si finalmente se incrementa el caudal ecológico del Tajo. Una medida que es respaldada desde el Ministerio de Transición Ecológica y desde Castilla-La Mancha.
Mireia Mollá remarcó en sus palabras que primero hay que «agotar» la vía del diálogo, pero también pidió más implicación de los ministros valencianos en el Gobierno Central, que «no está manteniendo una actitud colaborativa» con la Generalitat, dijo. Un mensaje dirigido a José Luis Ábalos, ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana desde enero de 2020; Luis Planas, titular de Agricultura, Pesca y Alimentación; el responsable de Cultura, José Manuel Rodríguez Uribes; y el ministro de Ciencia, Pedro Duque, nacido en Madrid, pero diputado por Alicante.
En la entrevista, la consellera recordó que «ahora estamos en la fase de propuestas», en la que considera que el ejecutivo valenciano «no puede quedarse de brazos cruzados», de ahí su insistencia en la desalación y en otras medidas como la depuración del agua, que permitan no depender el sur de la provincia de Alicante del trasvase «en exclusiva».
Mollà considera que la prioridad es «definir» los caudales ecológicos del Tajo, y asegura que si al cauce «no se vertieran residuos procedentes de Madrid no sería necesario incrementarlos». Es el quid de la cuestión, asegura y el Gobierno de Sánchez «no está teniendo una actitud dialogante».
La responsable de Agricultura en el Consell también lamentó que la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, no sea «muy partidaria» de la tesis valenciana y si finalmente, esas modificaciones «son lesivas para la Comunidad y se plasman en un Real Decreto, será hora de actuar jurídicamente», avanzó Mollà. La estrategia política está igualmente, según considera, en que los ministros valencianos en Madrid hagan fuerza. «No es cuestión partidaria», matizó.
En cuanto a la propuesta de la Diputación de Alicante, que ofrece sus servicios jurídicos a la Generalitat Valenciana en su ofensiva contra el recorte del trasvase, la consellera lo valoró positivamente al afirmar que le parecía «bien que haya otras administraciones que se sumen» a esta defensa de la llegada de caudales hídricos a la provincia de Alicante.
