Ximo Puig tendrá la última palabra sobre la ubicación del palacio de congresos de Alicante en el puerto. La presentación el pasado viernes del borrador con las líneas maestras de lo que el Ayuntamiento de Alicante y la Diputación quieren que sea el proyecto del futuro gran centro de congresos entra ahora en un largo camino administrativo, en el que va a ser clave la posición de la Generalitat, ya que serán los técnicos de las consellerias de Urbanismo y Transición Ecológica los que tengan que determinar si el complejo cabe en el puerto, antes, incluso de que se pronuncie Puertos del Estado. En concreto en los muelles 7 y 9, cuyo uso actual es exclusivo para carga y descarga de mercancía portuaria, algo que habrá que cambiar y tiene un procedimiento administrativo complejo, que al final pasa por València. Algo que ya ha sucedido, por ejemplo, con la colocación el muelle 5 de un edificio del Distrito Digital y la transformación del complejo de ocio de Panoramis en un centro de negocios, ya que en esa zona portuaria el uso máximo para oficinas era del 25% y ha habido que aumentarlo al 85%.
El cambio de uso en los muelles 7 y 9 para acoger el palacio obliga, en primer lugar, a que se plantee la formación de un consorcio para impulsar el proyecto, ya que ahora mismo, por muy buenas que sean la intenciones, el Ayuntamiento y la Diputación no pueden solicitar la concesión, ya que si fuera así la Autoridad Portuaria debiera denegarla porque en dichos muelles el uso es exclusivamente portuario.
En el escrito entregado el pasado viernes al presidente del Puerto, Juan Antonio Gisbert, el alcalde Luis Barcala y Carlos Mazón, presidente de la Diputación, ya le trasladaron la intención como promotores de afrontar la construcción con la figura jurídica de un consorcio, en el que podría tener cabida también la Generalitat. Ayuntamiento y Diputación ya han pedido la modificación de la Delimitación de los Espacios y Usos Portuarios (DEUP) y del Plan Especial del Puerto con el fin de incorporar los usos y ordenanzas urbanísticas que hagan posible la ejecución del proyecto. Ambos trámites deber recibir el visto bueno de la Generalitat antes de remitirlos a Madrid. Fuentes conocedoras de estos procesos calculan que la tramitación duraría unos dos años.
Ahora mismo y tras el paso adelante dado por el Ayuntamiento y Diputación, hay que modificar, por lo tanto, el DEUP y el Plan Especial, que se remitirá a la Generalitat para que analicen los planes las consellerias pertinentes aunque, básicamente, el tema será responsabilidad de la Conselleria de Urbanismo de Arcadi España. Por su parte, fuentes de la Autoridad Portuaria que preside Juan Antonio Gisbert, subrayaron que «nos parece un proyecto importante para la ciudad y se tramitará como la máxima colaboración».
ADRIÁN SANTOS PÉREZ, CONCEJAL DE URBANISMO DE ALICANTE: «Queremos aprovechar los espacios al aire libre, no un edificio cerrado»
Adrián Santos Pérez, concejal de Urbanismo, también debe jugar un papel importante. «Hemos trabajado mucho y lo vamos a seguir haciendo para lograr le mejor palacio de congresos posibles. Queremos aprovechar al máximo el entorno y la ubicación, por lo que además del edificio cerrado como sucede en Málaga o Palma de Mallorca, vamos a jugar con los espacios abiertos».
Por su parte, Mari Carmen Sánchez, edil de Turismo, se mostró satisfecha de la ubicación elegida. «Estábamos deseando que la noticia viese la luz porque son ya muchos meses los que llevamos trabajando en este proyecto. Es un gran aliciente para el turismo y estamos encantados. Alicante comienza a trabajar en serio para contar con un palacio de congresos. El aeropuerto es el quinto de España y el único que sirve a una provincia que no tiene palacio de congresos. Este producto tiene cada día más peso para las ciudades de destino. Han sido muchos muchos meses buscando una buena ubicación. Hemos encontrado la mejor opción posible para el desarrollo en el marco de un clúster tecnológico como se va a ubicar en el puerto».
MARI CARMEN SÁNCHEZ, VICEALCALDESA Y EDIL DE TURISMO: «Es un aliciente para el turismo y muy cerca del clúster tecnológico del puerto»
Un proyecto de que en la ciudad se viene hablando desde hace 60 años y que se ha elegido que se ubique en el interior del puerto, en concreto en una parcela de 21.000 m², en la que actualmente se encuentran la dependencias de la Guardia Civil. La operación se viene fraguando desde finales del año pasado y tiene ya hasta presupuesto. Un total de 45 millones de euros que financiarán la Diputación (30 millones) y el Consistorio (15). La participación económica de la Diputación es clave porque el palacio será un edificio polivalente que además de contar con un salón principal con capacidad para 2.000 personas, contará con dependencias para ubicar a los trabajadores de Suma, la agencia tributaria de la Diputación Provincial, según la información recabada por este periódico.
