El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, acaba de defender ante el Comité Europeo de las Regiones la necesidad de plantear una solución a las patentes de las vacunas, que permita aumentar su producción y alcanzar a toda la población mundial lo más pronto posible, como podría ser, ha apuntado, la suspensión temporal de estas licencias y su liberalización, como ha apoyado también el presidente de EE UU, Joe Biden. Puig ha instado en este sentido a compensar a las empresas farmacéuticas y a exigir la cooperación entre laboratorios para incrementar la producción, potenciando la colaboración entre innovadores y productores.
Esta intervención de Puig en el pleno del Comité de las Regiones llega después de la carta que remitió al presidente de esta entidad, Apostolos Tzitzikostas, y al resto de presidentes de las regiones representadas en este organismo de la Unión Europea, en la que hacía una reflexión sobre las patentes de las vacunas y la necesidad de encontrar una solución que agilice su producción masiva antes de que surjan nuevas variantes del virus. Una carta en la que proponía combatir el "nacionalismo" y el "mercantilismo" de las dosis, como ha recalcado también en su intervención por videoconferencia.
En su discurso, el jefe del Consell ha recordado que el covid-19 ha acabado con la vida de tres millones de personas en todo el mundo, tantas, ha dicho, como las víctimas de las batallas de Verdún y Stalingrado juntas, recalcando que “no nos podemos quedar esperando viendo las imágenes de India quemando cadáveres”. “Cada día que pasa y que Brasil, India y África no están protegidos hay una bomba latente por las posibles variantes del virus. Europa es solidaridad y es hora de desmostrarlo”.
El presidente del comité europeo ha destacado la importancia del asunto en que ha incidido Puig, y ha reconocido la necesidad de vacunar a la población tan pronto como sea posible para prevenir nuevas cepas de la pandemia.