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Las obras del frente litoral de Altea arrancan el 24 de mayo aunque la hostelería podrá mantener las terrazas este verano

Los trabajos, adjudicados por Costas, crearán una playa en el tramo comprendido entre el puerto en la Playa de la Roda y la nueva Playa de L’Espigó y se renovará la parte terrestre

Las obras arrancan el 24 de este mes de mayo INFORMACIÓN

La regeneración del Frente Litoral de Altea es una obra pendiente desde hace años y permitirá crear una playa en el único tramo donde no existe en la zona principal del paseo marítimo. Unos trabajos que arrancarán el próximo 24 de mayo, una semana más tarde de la primera fecha anunciada, y que, aunque se hagan en pleno verano, no afectarán a las terrazas en los primeros meses que podrán seguir trabajando hasta final de año. Así lo anunció este jueves el alcalde Jaume Llinares junto a los portavoces de Compromís, Diego Zaragozí y PSOE, Vicenta Pérez.

La regeneración de la fachada litoral del casco urbano de Altea es un proyecto "ambicioso" en el que se lleva trabajando desde los años 90 y en el que se han centrado todos los gobiernos locales de todos estos años de distinto signo político. Aunque siempre se ha considerado una "necesidad", diferentes problemas económicos y burocráticos han ido lastrando la realización de esta actuación que se llevará a cabo entre el Ayuntamiento y el Ministerio de Transición Ecológica.

El coste de ejecución de esta actuación es de 4.086.148 euros, de los que cerca de 1,5 correrán a cargo del gobierno central que corresponden a la zona marítima; y el resto lo sufragará el Ayuntamiento, 2,5 millones, de la zona terrestre, es decir, lo que será el futuro paseo de primera línea. El periodo de ejecución de 12 meses por lo que las obras afectarán de lleno a este verano. El alcalde apuntó que espera que se cumplan los plazos para que acaben en tiempo, es decir, en mayo del 2022 y así no llegar a otra temporada estival.

El proyecto está enmarcado en un convenio suscrito en julio de 2020 por el Ministerio y el Ayuntamiento de Altea. Esta actuación conjunta engloba dos proyectos con un plazo de ejecución de 12 meses: por un lado, el proyecto reformado de rehabilitación medioambiental de la fachada costera del casco urbano de Altea (parte marítima), Celdas Centro y Sur, que ha sido redactado por la Dirección General de la Costa y del Mar, y, por otro lado, la remodelación y ampliación del paseo del Mediterráneo entre el Carreró Astilleros y la Travessera Sant Pere de Altea, redactado por el Ayuntamiento de Altea.

 El 7 de julio de 2020 se firmó un convenio de colaboración entre el MITECO y el Ayuntamiento de Altea que fija que el Ministerio llevará a cabo la licitación, contratación, ejecución, dirección, control y vigilancia de la obra y que corresponderá al Ayuntamiento los gastos de mantenimiento y conservación de las actuaciones objeto del convenio. La ejecución de las obras se ha adjudicado por 4,1 millones de euros. El proyecto de rehabilitación medioambiental de la fachada costera del casco urbano de Altea mejorará la fachada marítima de la localidad mediante la conversión en playa urbana del frente litoral en el tramo correspondiente a la zona norte de la playa de La Roda, justo antes del límite con la playa de L´Espigó.

 Con ello se dará solución al problema actual del frente litoral de Altea, concretamente en el tramo comprendido entre el Puerto de Altea (Playa de la Roda) y la nueva Playa de L’Espigó, al generar una nueva playa que proteja la zona terrestre en este tramo y facilite la ejecución de las obras para homogeneizar la parte marítima de la fachada costera de Altea. Esta nueva playa, además de garantizar la protección de la costa, supondrá un nuevo espacio lúdico para el frente costero de Altea dando continuidad al tramo ubicado entre las playas de L’Espigó y la de La Roda. Para regenerar la playa se utilizará grava de canto rodado.  La iniciativa da continuidad, al “Proyecto reformado de rehabilitación medioambiental de la fachada costera del casco urbano de Altea (parte marítima). Celda Norte (el Charco)”, ya ejecutado en el año 2016 por la entonces Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y el Mar.

 A su vez, el Ayuntamiento de Altea, ha redactado el proyecto de remodelación y ampliación del paseo del Mediterráneo entre el Carreró Astilleros y la Travessera Sant Pere de Altea, que tiene por objeto urbanizar el nuevo espacio vinculado con el actual Paseo del Mediterráneo y consigue unificar y ordenar todo el espacio resultante, teniendo en cuenta los trabajos de regeneración medioambiental de la zona marítima de la costa urbana de Altea, con la generación de la nueva playa que ejecutará el MITECO a través de la Dirección General de Costas y el Mar.

Propuestas para evitar molestias

Llinares ha explicado que “desde el Ayuntamiento se han realizado diversas propuestas al Ministerio que han sido aceptadas por éste y por la empresa adjudicataria Torrescámara y Cia. De Obras S.A.”. La mayoría de ellas encaminadas a "minimizar el impacto de las obras en comercios, locales de hostelería y vecindario afectado". Porque las obras afectarán de lleno a toda esta zona de primera línea. Según los datos aportados por el alcalde, son 29 los establecimientos directamente afectados, que finalmente podrán estar ejerciendo su actividad hasta finales de año; por lo que durante el verano las terrazas podrán ofrecer servicio.

“Este era un tema que nos preocupaba mucho sobre todo después de un año de pandemia en la que han visto mermados gran parte de sus ingresos. Tras varias reuniones, hemos conseguido que el Ministerio y la empresa concesionaria hayan adaptado el plan de trabajo a nuestras peticiones con el objeto de perjudicar lo menos posible a los afectados; tanto en el ámbito comercial como en el referido al tráfico”, ha añadido Llinares.

El próximo día 24 se comenzará con el vallado y la señalización, además de la aportación de materiales y tareas preparatorias. Cabe recordar que la obra se realiza en la zona en la que actualmente hay un aparcamiento que desaparecerá con la actuación para dejar paso a un nuevo tramo de playa que enlace con la que ya se realizó del Espigó. Por ello, el viernes anterior se dará aviso en la zona de que será necesario la retirada de vehículos y que no se podrá aparcar en el mismo aparcamiento.

“El periodo de ejecución es de 12 meses y cuanto antes comience la obra, antes acabará. Es verdad que los afectados van a soportar molestias durante un tiempo, pero también hay que tener en cuenta que van a ser los mayores beneficiados con esta regeneración de la costa, ya que además de disfrutar de un entorno único en el que el mar recupera su protagonismo, sus negocios y viviendas se van a ver revalorizadas”, apuntó el alcalde.

Por su parte, la portavoz del Grupo Municipal Socialista, Vicenta Pérez, ha expresado la satisfacción de su grupo por el inicio de las obras. “Este proyecto es una apuesta por la que siempre hemos trabajado porque pensamos que todas las mejoras que se puedan hacer en nuestro municipio son un beneficio directo para los alteanos y al fin y al cabo esto redunda en los visitantes y la economía del municipio”, ha significado la edil.

En palabras de Pérez, “tras muchos años de reuniones, tanto en Madrid como en Alicante, siempre hemos puesto en valor el que la inversión se llevara a cabo y que a los afectados directos les incomodaran las obras lo menos posible”. “En este sentido hemos contado con la complicidad de Ministerio y empresa que lo han entendido y por eso los plazos de actuación se han diseñado de modo que durante el verano se acometerán obras en la parte marítima y el aparcamiento y ya pasado el verano se empezará la obra que afecte a las terrazas", según Pérez, quien concluye recordando que “con la ejecución de este proyecto se consigue recuperar la playa y zona en la que operaban los marineros. Pienso que es importantísimo recuperar el mayor número de playas posibles ya que somos un municipio que vive cara al mar y del que obtenemos muchos beneficios”.

Finalmente, Diego Zaragozí, Portavoz de Compromís se ha referido a trabajos inherentes y previos algunos de ellos al proyecto de regeneración que acometerá directamente el ayuntamiento, como el cambio de sentido circulatorio del carrer Sant Pere; la ejecución de infraestructuras municipales, tales como la renovación del alcantarillado y la conducción del agua potable. Unas mejoras que se ejecutarán pasado el verano y en días previos al inicio de las obras que afectan a la parte terrestre para aprovechar los tiempos y movimientos, evitando así incrementar las molestias.

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