La Policía Nacional ha detenido en Alicante y Elche a un hombre y una mujer de 23 y 19 años y origen armenio acusados de robar 60.000 euros en joyas en un establecimiento de la capital alicantina y de estafar a ocho comercios mediante la venta de joyas falsas que hacían pasar por piezas de oro auténtico.
La investigación policial continúa abierta por si han cometido otros fraudes similares cometidos en Elche, San Vicente Santa Pola y Murcia, según fuentes cercanas al caso.
El Grupo Operativo de Policía Judicial de la Comisaría de Distrito Centro de Alicante inició la investigación después de que el responsable de un establecimiento de compraventa de oro y metales preciosos avisara a la Policía. El comerciante relató que una pareja accedió a su local para intentar vender unas joyas y un empleado que las revisó comprobó que no eran de oro auténtico.
Las pesquisas revelaron que los dos sospechosos, un hombre y una mujer, formaban parte de un grupo armenio especializado en estafas y robo de joyas en joyería y casas de compraventa de oro.
La Policía vinculó a los implicados con el robo de 60.000 euros en joyas de oro y plata en un establecimiento de Alicante. Dicho robo fue cometido al descuido a mediados de abril en una casa de compraventa de oro y aunque inicialmente se cifró el botín en 25.000 euros el importe fue elevado a 60.000 en la denuncia.
Material interior sin valor
Las estafas eran cometidas haciéndoles creer a los joyeros y comerciantes que las joyas que intentaban vender eran auténticas, cuando en realidad se trataba de joyas falsas que solamente tenían un baño exterior de oro.
El interior de las joyas estaba hecho de un material sin valor y así lograron engañar a ocho joyeros o responsables de casas de compraventa de oro de Alicante.
Tras la denuncia de una víctima, la Comisaría Provincial de Alicante alertó del fraude a todos los establecimientos de la ciudad para que estuvieran prevenidos y les facilitaron una serie de características físicas de la pareja sospechosa y el tipo de joya con el que intentaban realizar la estafa.
A raíz de esta alerta, la Policía Nacional recibió numerosas denuncias por estafa presentadas por responsables de comercios de compraventa de oro y metales preciosos en Alicante. El fraude superaba en estos casos los 3.500 euros.
Los afectados cayeron en el engaño porque al aplicar el reactivo verificaban que era oro, pero sólo era en la superficie. El material del interior no tenía valor alguno y cuando lo descubrieron a raíz de la alerta policial los estafadores ya habían desaparecido.
No obstante, los investigadores lograron identificar al hombre implicado en las estafas y aunque cambió varias veces de alojamiento pudo ser localizado y apresado en un hotel de Alicante. La joven de 19 años fue apresada por la Policía en Elche y acusada de estafa y falsificación de documentos.
La Policía ha informado de que hasta el momento han sido localizadas ocho víctimas, aunque la cifra es mayor porque en otras localidades de l’Alacantí y del Baix Vinalopó se investigan fraudes similares.
