«En Alicante tenemos un plan». O, al menos, ese es el lema del Plan Local de Residuos de la ciudad de Alicante, que pretende ser la hoja de ruta de la gestión de los residuos municipales durante los próximos años y base del nuevo contrato de recogida de residuos, ya que el actual finaliza en agosto, al igual que el de limpieza viaria. El Plan de Residuos de Alicante, desglosado este viernes ante la oposición municipal por el jefe del servicio de Limpieza Viaria y Gestión de Residuos, Manuel Marco, se sustenta en cuatro ejes. «Fomentar la conciencia cívica, reducir la producción de residuos, mejorar la selección en domicilio y hacer más eficiente la recogida selectiva», según el gobierno municipal, que prevé destinar desde cuatro millones anuales más al nuevo contrato, pasando de los actuales 14,9 a 19 en 2023, fecha prevista para el inicio del nuevo contrato.
Para cumplir los objetivos marcados (duplicar la recogida selectiva), el documento incluye la necesidad de ampliar en unos 4.000 los actuales contenedores. Se ha previsto pasar de 88 a 2.056 contenedores de orgánica en 2022, de 1.334 a 1.654 de vidrio, de 1.045 a 2.000 de envases, de 875 a 1.971 de cartón. A su vez, se prevé reducir el gris en 650 contenedores en el año 2024, pasando de 3.423 a 2.773 unidades. También está incluida la ampliación de las papeleras: de las 7.891 actuales a las 9.231 para alcanzar la ratio de 27 por cada 1.000 habitantes en Alicante.
La recogida «puerta a puerta», que se descarta implantar como un sistema generalizado en toda la ciudad, se hará para cartón en zonas comerciales, en los mercadillos, con los residuos voluminosos como los enseres y, de forma particular, con sistemas de cooperación para los envases de la hostelería o el vidrio.
La producción de residuos en Alicante en la actualidad ronda las 194.000 toneladas anuales, más de media tonelada por habitante cada año. La previsión del bipartito pasa por superar las 200.000 toneladas año dentro de veinte años. En este, sentido, el plan municipal establece objetivos como alcanzar el 47,38% en 2022 en la orgánica, que debería para rondar el 60% en 2028. En la actualidad, es apenas del 5,7%. También se espera pasar del 12,1% actual al 25,3% en envases ligeros en ocho años, del 15,2% al 31,2% en papel y cartón, del 51 al 61% en vidrio y del 14,6% al 58,7% en textil [un servicio que todavía no gestiona el Ayuntamiento hasta que lo asuma en el modificado del contrato previsto para este verano].
Por otro lado, se prevén mejoras en otros servicios, con tres ecoparques más en la ciudad y tres nuevos ecopuntos móviles. También se incluye la instalación de doce centros de compostaje comunitario «repartidos por la periferia del municipio».
Reacciones de la oposición
Tras conocer los primeros detalles del Plan de Residuos, los socialistas aseguraron que han "confirmado su decepción, una planificación sin innovación alguna cuya única ambición es llenar la ciudad de contenedores". "Este Plan pone a Alicante en una situación contraria a lo pretendido en la estrategia europea de residuos, que nos pide implantar métodos alternativos a la disposición de contenedores por ratio de habitantes, como es el sistema Puerta a Puerta. La Concejalía de Limpieza pretende pasar de puntillas sobre esta indicación comunitaria, implantando este sistema sólo en superficies comerciales, no para los residuos domésticos como hacen grandes capitales europeas, Barcelona y algunos distritos de Madrid", según los socialistas, que considera que "si no se hace lo que pide Europa y se facilita una mejor separación en origen con sistemas complementarios a las islas de contenedores, Alicante nunca mejorará sus números de recuperación, reciclaje y eliminación". Los socialistas, en la presentación, han estado representados en el concejal Raúl Ruiz.
Por su parte, la concejala Vanessa Romero (Unidas Podemos) señala que "este Plan lo que hace es reconocer el fracaso actual en la gestión de residuos y, sobre el papel marca un itinerario para llegar a unos objetivos que ya deberíamos estar cumpliendo". "Se contemplan medidas que hemos venido defendiendo, como el incremento de la recogida selectiva o el aumento de contenedores, claramente insuficiente. Echamos en falta el implemento de otros sistema de recogida como el 'puerta a puerta' o el SDDR que entendemos ayudarían a mejorar los objetivos. Ahora falta saber si hay ambición para plasmar todo esto en pliego y si se va a aumentar el nivel de exigencia mientras que dure la prórroga de la actual concesionaria", señala la edil.
Por último, los concejales de Compromís Natxo Bellido y Rafa Mas, que asistieron a la presentación del plan, se han mostrado críticos con el gobierno municipal. "Hace meses que tenía que haber estado este plan local acabado, tal y como marca el Plan integral de Residuos de la Comunitat Valenciana, que señalaba el 1 de enero de 2021 la fecha tope para que todos los municipios de más de 10.000 habitantes contara con un plan loca. Los Planes Locales de Residuos suponen una oportunidad, además de una obligación, para que los municipios puedan establecer una regulación detallada y ajustada a sus necesidades y peculiaridades en lo que respecta a la gestión de residuos", señaló Bellido, quien considera que "la presentación ha sido interesante, así como las estrategias que se van a poner en marcha, que necesitan de mucha inversión y sobre todo del interés del bipartito para modernizar la gestión de limpieza y residuos". Por ello, "se debería apostar por nuevas medidas alternativas como el 'puerta a puerta'. Ahora bien, creemos que es un paso importante y siempre daremos apoyo a todo aquello que suponga avanzar en la gestión de residuos y limpieza de la ciudad ya que aún nos encontramos en una fase muy inicial, casi en pañales", finalizó.
A la presentación no acudió ningún concejal de Vox.
