El alcalde de Alicante, Luis Barcala (PP), no comparte la revisión de las restricciones de la Generalitat Valenciana frente la pandemia de coronavirus. Así lo hizo saber este viernes, poco antes de que el jefe del Consell, Ximo Puig, se reuniera con los principales ayuntamientos para abordar la última decisión del Botànic, que incluye el final del toque de queda y de las limitaciones en el número de personas en los grupos, que entran en vigor el martes.
Habrá un dispositivo para que se pueda hacer de todo, menos fogatas. Puede haber aglomeraciones de igual forma»
El regidor alicantino no entiende la decisión de la Conselleria de Sanidad, liderada por Ana Barceló (PSPV), de prohibir las hogueras en la playa la noche de San Juan. Barcala ve que la restricción no guarda coherencia con el fin del toque de queda o de las limitaciones en los grupos. «En Alicante, en la playa, no habrá hogueras porque está prohibido por Sanidad. Pero no cerraremos las playas porque sólo se prohiben las hogueras. Va a ser un problema. Habrá un dispositivo para que se pueda hacer de todo, menos hogueras. Puede haber aglomeraciones de igual forma. No se harán fogatas, se harán botellones. Solo pediremos coherencia», señaló Barcala, preguntado por las nuevas medidas de la Generalitat, dentro de la progresiva vuelta a la normalidad: «Se toman medidas a medias. Nos llama la atención la restricción en los aforos en los grandes espacios, donde es fácil de controlar las medidas de seguridad, como en la plaza de toros. Se dan contrasentidos. Voy a trasladarlo al presidente de la Generalitat». Y lo hizo, pero a través del concejal de Seguridad, José Ramón González, quien en la reunión con Puig pidió que se amplíe más el aforo de la plaza de toros, que este mes de junio acogerá, entre otros actos, las galas de elección de las Belleas del Foc y también la feria taurina con motivo del cincuenta aniversario de José María Manzanares. Por ahora, el aforo se limita a 4.000 personas, de las alrededor de 11.000 que caben en el recinto municipal. El Ayuntamiento espera que se amplíe, al menos, hasta las 6.000 personas.
El regidor alicantino insistió en las -a su juicio- contradicciones en las medidas del Consell: «Abrimos la mano por un lado, pero se propician fiestas en los pisos sin control y sin número máximo de asistentes. Acabará con denuncias vecinales. Se establecen restricciones en grandes recintos, como la plaza de toros, donde se controlan horarios, asistentes. y en otros entornos espacios, no». El alcalde, por otro lado, incidió en la necesidad de mantener la prudencia pese a los buenos datos de la evolución del covid: «La pandemia no ha terminado. Estamos mejorando la situación pero necesitamos seguir esforzándonos en superarla».
