Unas 200 personas se reunieron ayer en el Teatro Principal de Alicante para decir «no» a los indultos a los condenados del «procés». Entre una mesa petitoria para la recogida de firmas y un gran corro de simpatizantes, fueron llegado hasta la avenida de la Constitución los pesos pesados del PP, el partido que convocaba el acto. El encuentro se inició de forma simultánea a la concentración en la plaza Colón, en Madrid. Sin embargo, al contrario de lo sucedido en la capital, esta manifestación no contó en la provincia con el apoyo de Vox ni Ciudadanos. Al mediodía, eran 7.000 las firmas recogidas en Alicante, según los populares.
Entre aplausos, poco después de las 12 horas, llegó Carlos Mazón, presidente provincial del PP, arropado por César Sánchez y Macarena Montesinos, diputados en el Congreso; Eva Ortiz, secretaria general del PP en la Comunidad; y Toni Pérez, alcalde de Benidorm. Todos ellos protagonizaron la primera foto del encuentro.
«Me preocupa que no se defienda la Comunidad sabiendo lo que quieren algunos hacer desde Cataluña»
Ninguno de los pesos pesados del PP se perdió la cita, en la que Mazón recogió todo el protagonismo como líder en auge de la formación. Los simpatizantes le pidieron fotografías desde su llegada, y no hubo quien no buscara una conversación con él durante el encuentro.
«Nos apetecía mucho dar una respuesta a la gente de Alicante y de la Comunidad», explicó el también presidente de la Diputación y candidato único a dirigir el partido en la Comunidad. «No es un frente contra nadie, es una declaración en favor de la convivencia», señaló Mazón, quien apuntó que defiende la integridad territorial «no solo como país», sino también como Comunidad Valenciana, «porque junto con los sueños independentistas también hay sueños anexionistas que no nos ocultan y que todos conocemos».
Mazón lanzó un dardo a Ximo Puig, al que le acusó de aplaudir «a su jefe de filas». «Me preocupa que se aplauda al chantaje al jefe, porque esto es un chantaje al jefe del Gobierno, que si cede estará dando alas a los sueños que quieren romper España», manifestó el popular en relación a los indultos. El dirigente criticó las «señales de puentes, de entendimiento y de un clima de diálogo» por las que apostó el presidente de la Generalitat el día que tomó posesión Pere Aragonés, presidente de Cataluña.
«Aquí se está traficando con la justicia, y eso es dinamitar el Estado de derecho»
César Sánchez, a su vez, señaló que los indultos «son una auténtica vergüenza» y que durante la jornada del domingo se demostró «en la inmensa mayoría de las capitales de toda España». «La gente ha salido a calle a manifestarse, a decir que no se puede mercadear con el Estado de derecho», añadió.
El alcalde de Alicante, Luis Barcala, atendió también a los medios de comunicación durante la mañana. «Se está traficando con la justicia», criticó el primer edil. «El indulto no es para eso, el indulto es para reflejar situaciones que son socialmente aceptables, y que además llevan implícito el arrepentimiento de quien los ha cometido -los delitos-», aseguró Barcala, quien subrayó que es «totalmente inadmisible».
La concentración en el Teatro Principal duró cerca de una hora y media y reunió a diputados nacionales, autonómicos y provinciales, senadores y alcaldes de distintos municipios.
«Es una vergüenza que el Gobierno de Pedro Sánchez esté mercadeando con todos los españoles»
En un mesa petitoria, tanto los presentes como otras personas que se acercaban, firmaron un escrito que enunciaba, entre otras ideas: «Por España, pedimos su firma contra los indultos del Gobierno de Pedro Sánchez a los condenados por sedición y malversación».