La provincia de Alicante y sus costas vienen registrando aproximadamente un terremoto cada dos días desde hace ya más de un mes. Desde el pasado 19 de agosto se han producido 17 seísmos, y si ampliamos el foco hasta el inicio del mes pasado, la cifra de fenómenos aumenta a 25. Ninguno de estos movimientos ha sido de gran magnitud y algunos ni siquiera han llegado a ser percibidos por la población, especialmente algunos cuyo epicentro se ha situado en el mar, aunque la sucesión de pequeños temblores sí ha llamado algo la atención.
La mayoría de los terremotos registrados desde principios de agosto han tenido una magnitud inferior a 2 grados en la escala de Richter, tal y como reflejan los datos recogidos por el Instituto Geográfico Nacional (IGN) y la Red Sísmica de la Universidad de Alicante. Tan solo cinco han oscilado entre los 2 y los 3 grados, y uno ha sido algo mayor, aunque con epicentro en el mar, registrado el 29 de agosto y con 3,8 grados. Resulta un tanto llamativo observar la ubicación de los fenómenos, ya que se ha producido una cierta actividad en el entorno de las sierras del Maigmó y el Cid, con varios temblores localizados en Petrer, Agost, Tibi y Monforte.
La sucesión de episodios está siendo algo más intensa que de costumbre, pero no llega a ser en absoluto excepcional, según explica el director de la Red Sísmica de la UA, José Delgado. Lo más común es que la cifra de terremotos en la provincia y sus costas oscile entre los 60 y los 80 al año, pero el hecho de ser una zona de contacto de placas tectónicas hace que los movimientos puedan producirse con más frecuencia en cualquier momento. En cualquier caso, reitera, no se trata para nada de una situación preocupante.
Delgado señala, eso sí, que «es un poco el aviso que nos hace la naturaleza» de que nos encontramos en una zona con alta actividad sísmica, y que cabe tenerlo muy en cuenta. «Afortunadamente estos terremotos son pequeños, pero os recuerdan que pueden ocurrir» fenómenos más intensos, y que, de hecho, históricamente se han producido, como fue el caso del ocurrido en la Vega Baja hace 192 años.
«Nada que ver con lo que ocurre en La Palma»
Los temblores actuales sí están más relacionados con otros que se registran frente al litoral de Melilla
El director de la Red Sísmica de la UA hace hincapié en que los periodos con una cierta actividad tectónica son algo completamente habitual, propio de las características geológicas del territorio en que vivimos. Cabe recordar, en este sentido, que la provincia de Alicante es una de las más sensibles de la España peninsular ante este tipo de fenómenos, como publicó este periódico hace algunas semanas. Por ello, insiste, la sucesión de temblores que está teniendo lugar estos días no tiene «nada que ver» con lo que está ocurriendo en la isla de La Palma, donde «sí hay una crisis sísmica de verdad», con la erupción de un volcán en la tarde de ayer.
Otro lugar que en estos momentos registra un número significativo de temblores, aunque mucho menos intenso que en La Palma, unos diez cada jornada en los últimos días, es el mar de Alborán, frente a la ciudad de Melilla aunque a distancia de ella. En este caso, señala José Delgado, sí puede haber una cierta relación con lo que ocurre en la provincia, al ser la misma zona de contacto entre placas, aunque mínima en todo caso. El experto reitera que los pequeños terremotos de estas semanas son simplemente un recordatorio de que se trata de un territorio activo en términos sísmicos, y que hay que ser conscientes de esta circunstancia.
