Cada 25 de septiembre se celebra el Día Mundial del Farmacéutico y hacemos un repaso sobre el presente y el futuro de esta profesión esencial con el máximo responsable del Colegio Oficial de Farmacéuticos de la provincia de Alicante (COFA), que desde el 8 de enero de este año es Andrés García Mongars, cuando tomó posesión del cargo. El presidente reivindica el papel de la Farmacia y su integración urgente dentro del sistema sanitario español, ya que considera que «podemos aportar muchísimo».
¿Cómo está viviendo su primer año como presidente del COFA y cuáles son las acciones más inmediatas que quiere impulsar?
Venimos de unos meses muy intensos en los que hemos estado ofreciendo constantemente propuestas y colaboración a la Administración Pública en cuanto a la coordinación de las vacunas. Desde el sector farmacéutico podríamos haber hecho mucho más, como participar en campañas de salud para incentivar la vacunación... Pero de momento no ha podido ser.
Mi principal objetivo es «reconectar» con todos los colegiados, porque necesito aprender de sus inquietudes. Antes de ser presidente no percibía tanta variabilidad dentro de nuestra profesión, por eso veo fundamental volver a los sistemas y canales que teníamos antes del covid, que eran más dinámicos, nos permitían tener más información, y que se han ido perdiendo un poco con toda la situación que hemos vivido.
Por tanto, ahora mismo seguimos centrados en un plan esencial de transparencia documental. Queremos que los colegiados puedan acceder a todos los servicios colegiales desde su puesto de trabajo, en remoto. Vamos a lanzar la carpeta digital de cada uno de ellos donde tendrán acceso a toda su información en tiempo real.
Esto es un proyecto que está muy avanzado pero aún debemos adaptarlo a todos los dispositivos y analizar si somos capaces de poder manejar tanta información. Las primeras pruebas que hemos hecho han sido muy satisfactorias, todos los incidentes se resuelven muy rápido y los tiempos se han acortado de una forma sorprendente. Estamos trabajando en ello.
Las pruebas de autodiagnóstico por fin han llegado a las Farmacias… ¿Por qué cree que han tardado tanto? ¿Están funcionando como se esperaba?
Esto es un tema que se venía solicitando desde marzo del 2020. Teníamos esa posibilidad, clave en un momento de emergencia como el que estábamos viviendo, y no se ha querido regular antes, desconozco por qué. Cuando se ha querido regular en el mercado algo tan esencial, como puede ser un medicamento, la Administración ha actuado rápidamente fijando su precio, controlando la distribución… Si se hubiera permitido antes la venta de pruebas de autodiagnóstico en farmacias habríamos evitado, por ejemplo, que se comercializaran de manera ilegal y sin homologar por internet.
Dicho lo cual, están funcionando muy bien, pero ha faltado algo clave que era nuestra participación en el sistema sanitario. Ofrecimos la posibilidad de realizar las pruebas en las mismas farmacias y que fuéramos los farmacéuticos quienes comunicáramos los positivos y negativos, que sería un adelanto que el sistema podría aprovechar. En la Comunidad Valenciana, de momento, no es así, pero en otras como Cataluña ya se está haciendo.
La función de la Farmacia va mucho más allá de dispensar medicamentos. Durante la pandemia han demostrado ser, más que nunca, primera línea de la sanidad. ¿Considera que uno de sus papeles es el de actuar como «filtro» sobre información que reciben los pacientes?
Sin duda, el «caos informativo» ha sido uno de los puntos más preocupantes de esta crisis sanitaria. A las farmacias entran muchas personas, cada una con sus miedos, y el miedo solo se calma cuando se transmite confianza. Pero para transmitir confianza primero teníamos que tener claro qué estaba pasando… Y a veces el criterio clínico, científico y nuestras habilidades no eran suficientes, porque lo que un día era válido, al siguiente no.
La duda más frecuente de los farmacéuticos era qué comunicaban al ciudadano, y la nuestra qué comunicábamos al colegiado para transmitir a la sociedad. Durante la pandemia, toda la estructura colegial ha estado recibiendo muchísima información a través de distintos canales. Nosotros, como farmacéuticos (que al final somos científicos), teníamos que filtrar qué noticias tenían evidencia científica y cuáles no. Procurábamos transmitir continuamente a nuestros compañeros lo que era «más ajustado a la ciencia» en ese momento.
Hay que tener en cuenta que en pleno pico de la pandemia, con la saturación de la atención primaria y los hospitales , el único establecimiento abierto y con acceso directo a un profesional sanitario eran las farmacias. Los ciudadanos venían a desahogarse y a consultarnos sus dudas, y nosotros nos esmeramos en contrastar la información que recibían de internet y los medios. Me gusta decir que hemos sido «filtradores del cara a cara». También estuvimos ahí para tranquilizarles y ofrecerles nuestro apoyo. En cierto modo, también hemos sido «psicólogos».
¿Por qué cree que es importante la existencia de un Día Mundial del Farmacéutico?
Es una buena forma de darle relevancia a la profesión. La sociedad tiene que conocernos y saber el papel que desempeñamos realmente. Durante muchos años se nos ha visto solo como «dispensadores» de medicamentos, pero detrás hay mucho más: tenemos industria farmacéutica; contamos con farmacéuticos de hospital, cuya labor en este tiempo ha sido fundamental informando a los médicos de qué fármacos había que administrar a los pacientes, cómo combinarlos, su posología…; los farmacéuticos analistas han estado haciendo pruebas PCR todos los días… Por todo ello, debe haber un Día del Farmacéutico, para dar a conocer todas las secciones de esta profesión y poner en valor nuestro papel sanitario.
¿Qué iniciativas ha preparado el COFA con motivo del Día de Farmacéutico?
En Alicante, la noche del 24 al 25 de septiembre se ha iluminado de verde el Castillo de Santa Bárbara. Además, 17 ayuntamientos de toda la provincia se han sumado a esta iniciativa iluminando también algunos de sus monumentos o edificios emblemáticos. Por otra parte, también tenemos una reunión con la corporación municipal.
Pero lo que hemos hecho diferente desde el COFA ha sido preparar, junto a las asociaciones de pacientes, una serie de encuentros con farmacéuticos para charlar, en un pequeño desayuno, sobre cómo nos ven, que necesitan de nosotros… Y todos estos testimonios los uniremos en un vídeo muy especial.
¿Qué le demanda el sector farmacéutico a las instituciones?
Lo que tenemos que reivindicar es nuestra integración urgente dentro del sistema sanitario. Tenemos que estar ahí, si no, no podemos dar el servicio adecuado. También queremos que nos tengan en cuenta en todos los programas y campañas de sanidad pública. Creo firmemente que hemos demostrado que, si nos ponemos «mano a mano», podemos aportar muchísimo.
Colegio de Farmacéuticos de la Provincia de Alicante
Tlf: 965 123 123
