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Paula Tuzón

«Ecologistas y agricultores deben sumarse al proceso fotovoltaico porque es un momento crucial»

La secretaria autonómica de Emergencia Climática y Transición Ecológica defiende la energía solar porque no contamina, es barata y contribuye a un planeta más habitable, además de que permite a cualquier persona producirla. Pero, eso sí, advierte que debe implantarse con orden y regulación de forma rápida y decidida.

Paula Tuzón Marco se licenció en Física en 2006 y en 2011 consiguió el Doctorado Europeo en Física con Premio Extraordinario. | INFORMACIÓN INFORMACIÓN

¿A qué se debe el «boom» de plantas solares de estos últimos años en la provincia de Alicante?

Este «boom» no solo ocurre en Alicante. Hay una situación similar en muchas otras partes de España y del mundo. Ocurre porque estamos en una situación de emergencia climática a la que hemos llegado, fundamentalmente, por el recurso masivo a los combustibles fósiles para obtener energía. Ahora nos toca cambiar el sistema de obtención de energía por uno renovable para cumplir los acuerdos de París y los objetivos de descarbonización.

¿Qué supone?

Inversiones públicas e incentivos al sector, pero también cambios en las regulaciones para agilizar los trámites, imponer porcentajes de producción de energía renovable....Toca abordar el cambio energético de manera decidida. Y, además, tenemos la suerte de que el desarrollo tecnológico de las energías renovables las hace ser muy competitivas. Ahora, la fotovoltaica es la manera de generar energía más barata.

¿Puede haber un movimiento especulativo detrás?

Es cierto que hay muchos proyectos que están jugando a tantear el mercado y que provocan procesos especulativos. Se plantean sobre el mapa o se llegan a presentar ante los medios de comunicación pero luego no se inician el proceso para que la Generalitat pueda contrastar que cumplen con los requisitos y obtener la autorización. Para evitar este tipo de especulación el año pasado la Conselleria de Transición Ecológica pidió que se incluyese un artículo en el decreto ley 14/2020 donde se señala explícitamente que la autorización para instalar una planta fotovoltaica caduca si en un plazo de seis meses no ha cumplido ciertos trámites previos a la autorización. Es una medida claramente disuasoria para el que quiere especular.

¿Cuál es la postura de la Conselleria en esta materia?

La Conselleria de Emergencia Climática y Transición Ecológica, que dirige Mireia Mollà, está muy preocupada por cumplir con los objetivos de descarbonización. Por eso apostamos por impulsar tanto como nos sea posible la sustitución de combustibles fósiles por energías renovables. Para lograr las metas que nos hemos propuesto hemos desplegado una doble estrategia. Por un lado, impulsar el autoconsumo de renovables al máximo, pero sólo con la ocupación de los tejados y las superficies construidas sólo lograremos un 25% de los objetivos de descarbonización. Por esa razón hemos desplegado una segunda línea estratégica para impulsar la instalación de plantas solares y eólicas de mayores dimensiones.

¿Y qué se ha hecho?

La conselleria ha dado un paso al frente en la regulación de las plantas solares y eólicas, para que su implantación se produzca de forma sostenible y que la ocupación de suelo tenga el mínimo impacto posible. Para los 6.000 Megavatios que las plantas fotovoltaicas deben generar antes de 2030 tan solo necesitamos un 0,5% de la superficie de la Comunidad. Y estamos convencidos de que somos capaces de hacerlo de forma garantista y ordenada, pero también rápida y decidida.

¿Qué opinión le merece el rechazo de agricultores y ecologistas a las plantas solares?

No creo que exista una oposición mayoritaria a las plantas fotovoltaicas, ni de los ecologistas ni de los agricultores. Creo que hay una demanda para que la implantación se haga de forma ordenada y regulada y a ella hemos respondido con medidas que regulan claramente los procesos, pero es importante que las completemos mediante la participación, la explicación y la implicación de toda la sociedad.

¿Es un cambio cultural?

Efectivamente el cambio de modelo energético también es un cambio cultural porque a lo largo de la historia hemos aceptado las agresiones al medio natural para conseguir comida o construir casas en nuestro territorio, pero no para obtener energía. Ahora hay que acelerar la descarbonización y tenemos la oportunidad de hacerla ordenadamente y de manera rápida para salvar a nuestra generación y a las futuras de un desastre climático. Un planeta 3 o 4 grados más cálido es un planeta al que muy difícilmente nos vamos a poder adaptar. Y si para tener un planeta habitable hay que ceder pequeñas porciones de suelo a la energía renovable, tendremos que hacerlo. Es el acto más generoso que podemos tener ahora con nuestros hijos.

¿Qué ventajas e inconvenientes tiene la energía solar?

 La mayor ventaja es que tenemos una tecnología que nos va a permitir tener un planeta habitable porque no genera vertidos, ni emisiones a la atmósfera, ni su anclaje necesita cimentación. Y, además, es barata. Su principal inconveniente, por ahora, es el de la intermitencia, porque no siempre hace sol y todavía requieren sistemas de respaldo o almacenaje. Pero cualquiera puede producir energía solar y ello puede impulsar una democratización que impida la concentración de mucha riqueza en unas pocas manos.  

Paula Tuzón, secretaria autonómica de Emergencia Climática y Transición Ecológica. INFORMACIÓN

 ¿Por qué se tarda tanto tiempo en aprobar o rechazar estos proyectos?

 Porque hemos heredado unos procesos burocráticos antiguos y la aceleración que dará el nuevo marco regulatorio requiere un periodo de adaptación. Aun así, estamos convencidos de que después de la aprobación del decreto ley 14/2020 y con la incorporación de personal debidamente formado todo irá mucho más rápido. De todos modos, es necesario recordar que la Conselleria de Transición Ecológica no és la única que informa sobre los proyectos de plantas fotovoltaicas. De hecho, es la Conselleria de Energia e Industria la que gestiona el grueso del expediente del proyecto, luego lo supervisa la Conselleria de Territorio y, finalmente, Transición Ecológica. Por eso es importante que todas las consellerias tengan muy claros sus criterios y agilicen los procesos de tramitación.  

¿Cómo potenciar las energías renovables sin suscitar rechazo en ecologistas y agricultores?

Hay que acompañar el proceso y pedirles que se sumen de manera explícita y vehemente. Esto va de medio ambiente y de agricultura también. Hay que entender que estamos en un momento crucial a nivel planetario y no podemos seguir quemando fósiles para conseguir energía. Hay que generar la energía de otra manera y ahora mismo ubicar bien las plantas solares en nuestro paisaje es importante, porque significa que estamos en el camino del progreso y la sostenibilidad.

¿Y los ayuntamientos también se oponen a las fotovoltaicas?

 No hay un rechazo mayoritario por parte de los ayuntamientos. De hecho, en la Conselleria hemos hecho varias reuniones con los municipios para explicar el proceso, la regulación, las oportunidades y los alcaldes y alcaldesas sienten que pueden ser protagonistas de este cambio. Los ayuntamientos saben que deben contribuir a la generación de energía renovable y el debate siempre es cómo hacerlo de la mejor forma, porque se busca lograr dos objetivos importantísimos: democratizar la generación de energía y romper con los oligopolios y crear empleo local para un desarrollo deslocalizado, diversificado y sostenible. Es un modelo mucho más acorde a lo que nos pide este siglo y una nueva manera de entender la sociedad. Creo que muchos municipios están entusiasmados al descubrir que pueden participar en la planificación de las instalaciones.

Paula Tuzón en su despacho de la Conselleria de Transición Ecológica. INFORMACIÓN

 La energía eólica también generó una fuerte oposición verde por suimpacto visual en las montañas...¿este hecho ha condicionado que se haya paralizado su implantación en la provincia?

 El plan eólico y la zonificación que se desarrolló en su momento están plasmados también en el decreto ley 14/2020 y forman parte de la aceleración hacia la descarbonización. Insisto, las energías renovables actuales pueden tener un impacto visual, pero son muy inocuas en otros aspectos y su implantación indica que estamos haciendo las cosas bien.

¿No considera muy farragosa la tramitación de estos proyecto al tener que intervenir hasta tres Consellerias diferentes?

 No. Porque los criterios están claros y mapeados. No debemos vacilar, porque cuando los criterios están claros todo es más fácil y los informes se hacen más rápido. Estamos en disposición de hacerlo bien y rápido. También de ver si, después de la aprobación del decreto, hay algo que sigue sin funcionar. Si es así, el departamento correspondiente tendrá que verlo y corregirlo.

¿En otras Comunidades Autónomas se está produciendo la misma problemática que en la Comunidad Valenciana?

 Es un proceso global y compartido en otros lugares. Eso es buena noticia. Significa que la humanidad por fin se ha puesto las pilas. Ahora hay que superar el debate y ser rápidos.

¿Qué medidas han aplicado para evitar que las plantas fotovoltaicas puedan instalarse en zonas protegidas o de valor ambiental o paisajístico?

 Para evitar esas situaciones desde la Conselleria de Transición Ecológica pusimos a disposición de la sociedad valenciana y de los promotores un mapa con zonas en rojo (excluidas para poner fotovoltaica), naranja (a evaluar según las características del proyecto) y gris (donde es posible instalar una planta con la evaluación ambiental correspondiente). Este mapa sirve precisamente para que los promotores sepan dónde es más fácil ubicar los proyectos. Si pretenden ubicarse en una zona de especial protección, ya saben que será más difícil obtener los permisos, pero en general Transición Ecológica es propositiva y proactiva. Queremos que el desarrollo renovable se multiplique por 16 en fotovoltaica lo antes posible, sin que eso signifique dar carta blanca.

¿A este ritmo se alcanzarán los objetivos fijados por la UE?

Al ritmo actual, no. Al ritmo que hemos previsto con la nueva regulación, las inversiones, el consenso social y la convicción de todos los implicados, sí. Pero hemos de apretar porque en la conselleria estamos haciendo todo lo posible.

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